El reto del país, reunir las piezas correctas para su desarrollo

GUADALAJARA, JALISCO (28/ENE/2014).- Para las economías de Latinoamérica, incluida la de México, reunir las piezas correctas para su desarrollo “sigue siendo un reto muy serio”, afirmó el estadounidense Paul Krugman, ganador del Premio Nobel de Economía en 2008.

El también premio Príncipe de Asturias en Ciencias Sociales en 2004, será el orador principal en el Congreso Internacional de Negocios Los Nuevos Paradigmas de la Competitividad, un foro destinado a profesionistas y estudiantes que, con sede en la Universidad Autónoma de Guadalajara, reunirá los días 13 y 14 de marzo a expertos y personalidades en la materia procedentes del país y el extranjero.

Krugman comenta que México, en comparación con Estados Unidos u otros países, parece encontrarse en condiciones “relativamente más sencillas” pero, admitió, que a pesar de mantener un discurso político constante que lo describe como “el país del futuro”, lo cierto es que “en los últimos 20 años se han implementado reformas que buscan ‘abrir’ su economía, para pasar de ser productor de recursos a convertirse en manufacturero; con todo, los índices generales de crecimiento han sido decepcionantes. Quizá ahora haya indicios de recuperación, pero habría que detectar los problemas estructurales que obstruyen la posibilidad de despegue”.

Para el profesor de la Universidad de Princeton, México es ejemplo de “una buena historia” en materia económica durante las pasadas dos décadas, y ejemplo de que “las políticas sociales de ayuda a la población más deprimida no están reñidas con el crecimiento económico”.

Ahora, aunque reconoce estar “completamente desinformado” respecto de las más recientes reformas en nuestro país, su percepción es que –con todo– respecto de Estados Unidos y ciertas naciones europeas, se cuenta “con una más libre capacidad de acción en su economía”, además de “menores dificultades” de cara a su “política monetaria”.

Por otra parte, tras la reciente conclusión de los trabajos dentro del Foro Económico Mundial en Davos, Suiza, Krugman es claro al afirmar que no cree “que estemos en un punto donde podamos decir que existe alguna coordinación política entre las grandes economías o que haya algún movimiento significativo en torno a asuntos de carácter global; en ese sentido, no creo que la pasada edición del foro será memorable, no encontré ningún encabezado o noticia que me indicara un cambio a nivel mundial”.

Ante una situación generalizada de aumento del desempleo y baja en la producción, destaca que los rasgos de esta “crisis” se muestran como resultado de un periodo de descenso después de etapas de gran desarrollo pero que, “tras un breve lapso de apoyo gubernamental que terminó, ahora lo que hay es una serie de políticas de austeridad ‘singulares’ a lo largo del mundo occidental, lo que ha perpetuado esta crisis”.

Para el economista, en los últimos tiempos Estados Unidos y Europa han cometido “numerosos errores al enfrentar situaciones de crisis económicas, arrastrando en ese proceso a otros a países. Para las economías emergentes, la clave parece ser hallar fórmulas de crecimiento sostenido; para Latinoamérica, en específico, los últimos 15 años han sido mejores que en el pasado, pero aún resta descubrir el secreto para ese desarrollo, a pesar de que sabemos que se necesita buena educación, infraestructura, estabilidad social (porque los niveles de criminalidad pueden ser un problema para el crecimiento significativo); reunir las piezas correctas sigue siendo un reto muy serio”.

EL DATO
Pobreza

En cuanto al problema de la pobreza, Paul Krugman refirió que se trata de un asunto “complejo y simple a la vez. Si se piensa que las partidas destinadas a trabajadores de bajo nivel se han mantenido o reducido en los últimos 40 años, no hay misterio alguno, hay menos oportunidad para que las familias de los trabajadores salgan de su situación de pobreza”.