El consumo de café crece en México

CIUDAD DE MÉXICO (20/SEP/2010).- La cadena de cafeterías Finca Santa Veracruz considera que este es uno de los mejores momentos para que inversionistas grandes y pequeños retomen el ritmo de los negocios que tienen como hilo conductor al café.

La historia de esta empresa inició hace 10 años en los pasillos de la Escuela Superior de Contaduría y Administración (ESCA), que pertenece al Instituto Politécnico Nacional (IPN).

En un pequeño espacio, acondicionado para la venta de café de altura, José Luis Navarro Chinchilla, actual director general de la Finca de Santa Veracruz, inició su travesía en el sector de las barras de café.

Hoy en día, esta empresa cuenta con más de 150 puntos de venta y este año pondrá en marcha otros 30 nuevos puntos, lo cual lo convierte en el tercer competidor más importante y posiblemente, una vez que los efectos de la crisis sean menos visibles, emprenderá el viaje hacia Estados Unidos y Canadá.

“Había qué traer máquinas cafeteras desde Italia”, porque en México sólo había un par de firmas productoras de cafeteras, aunque de mediana calidad, afirma.

En entrevista, Navarro dice que el potencial del mercado es prometedor pues el consumo per cápita es bajo todavía en comparación con Estados Unidos o los países europeos.

Sólo es necesario darle a los consumidores mayores accesos a las barras de café y propiciar que comparen el sabor del aromático, porque una vez que alguien prueba café de calidad, regresará, dice Navarro.

—¿Cómo está integrada la empresa?

—Finca Santa Veracruz es una empresa integrada de manera vertical, ahora sí que desde la semilla hasta la tasa.

Estamos conformados desde la producción, todo lo que es la torrefacción (tostado), y lo que es la parte de ventas a tiendas de autoservicios como Walmart, Superama, Comercial Mexicana, así como nuestros puntos de venta.

A la fecha contamos con un total de 150 puntos de venta en operación, algunos propios y algunos franquiciados.

Nuestro modelo tiene diferentes tamaños, y una franquicia tiene diversos formatos, desde lo que llamamos el modelo H4, que son los carritos, que ponemos en los hospitales y tienes toda tu oferta de producto en un espacio muy pequeño, a formatos de quioscos, espacios más grandes, y lo que tenemos como tiendas que son locales pequeños.

En general nuestro formato es pequeño y con algunas incursiones en espacios urbanos.

El negocio consiste en vender el mejor café, porque eso es realmente lo que hacemos, producimos un café de altura que tostamos con turbina de aire caliente, en vez de cilindros, con un proceso de calidad importante y vendemos franquicias.

—¿Y cuál es el diagnóstico que se hace del mercado de café mexicano?

—Tenemos como cifras que ha habido un incremento real en el consumo per cápita de café tostado, es una realidad que el mexicano está tomando cada vez más café.

La oferta a la calle es cada vez más, desde las tiendas de conveniencia que ofrecen un café americano de buena calidad y las importadas como Starbucks, como Gloria Jeans y las mexicanas que peleamos nuestro lugar, como Finca Santa Veracruz, The Italian Coffee, Punta del Cielo, y ahí está el mercado, ha ido creciendo.

—¿Y cuáles son los consejos que daría a los inversionistas de este sector?

—Les diría “ojo con la ubicación”, que es la clave de este negocio; obviamente la calidad que es lo que le vamos a ofrecer al consumidor, es decir, costo-beneficio, el costo de lo que pago y la calidad de lo que me dan; y como segundo punto relevante es que la ubicación es fundamental.

CLAVE
Los orígenes

Se conoce como café a la bebida que se realiza con agua caliente o fría y granos tostados de la planta llamada cafeto (Coffea). Existen dos hipótesis sobre el origen de su nombre. En la primera, se afirma que se deriva de la palabra arábica qahwah. La otra, que tiene que ver con la provincia Kaffa, al suroeste de Etiopía, donde la planta es de forma silvestre.

Se dice que hace 500 años, aproximadamente, las plantas de cafeto fueron llevadas al sur de Arabia, lugar donde fueron cultivadas y su consumo comenzó a extenderse rápidamente.

Mitos y realidades

El café puede ayudar en el desempeño mental.

Cierto.- Los especialistas confirman que se ha visto que el café, gracias a su contenido de cafeína, puede ayudar a mejorar el procesamiento de la información, por ejemplo, cuando tenemos que asimilar grandes cantidades de datos y tomar decisiones rápidamente.

La cafeína es un estimulante del sistema nervioso, por lo que el café favorece la concentración, permitiendo pensar con mayor claridad y rapidez. Por eso, tomar una o dos taza de café mientras estudias o preparas una presentación importante puede ayudar a mantenerte alerta y ágil.

Puede ayudar a incrementar el desempeño físico.

Cierto.- La evidencia científica ha demostrado que el rendimiento físico puede ser mejorado tras el consumo de la cafeína. Estudios recientes muestran que la cafeína puede ayudar a que los atletas se ejerciten sin sentir cansancio por más tiempo y pueden rendir más.

Disfrutar de una taza de café antes del ejercicio puede ser una opción para rendir más en tu sesión física. Sólo recuerda que si tu práctica de ejercicio es muy temprano, también el desayuno es fundamental.

Provoca insomnio

Falso.- Los médicos señalan que el café puede tomarse a cualquier hora del día, pero algunos organismos tienen mayor sensibilidad a la cafeína, ya sea la contenida en el café o en otras bebidas y alimentos.
Esta bebida no es la causante directa ni única del insomnio. Ahora bien, si la cafeína no es lo tuyo, una taza de café descafeinado puede ser una buena opción.

Es irritante

Falso.- De acuerdo a los especialistas, tomar café no produce irritación estomacal de manera directa, si es que se acompaña de algún alimento; además, recientemente se sabe que la costumbre de beber café puede promover la formación de la flora intestinal.

Cuando consumimos café elaborado con frutos maduros, como ocurre casi siempre con el café tipo expreso, el estómago no se irrita de manera inmediata; sin embargo, algunas personas refieren ardor de estómago después de tomar café, pero no hay pruebas concluyentes de que el café es causa directa y única de daño al estómago o contribuya a la formación de molestas úlceras gástricas o duodenales.