Desde esos remotos tiempos, las cosas no han cambiado mucho: ahora son los más hábiles, los más audaces y quizá también los mejor dotados en las lides políticas los que cuidan el orden, el patrimonio y la alimentación de los demás. Su poder y sus funciones se han incrementado exponencialmente.Lo anterior es la teoría de cómo deberían ser las cosas, pero la realidad es que al cruzar el camino entre el hombre de las cavernas y el hombre de las urnas, los defectos primarios se han agudizado y las ventajas iniciales se han perdido. Por citar un ejemplo, hablemos de los 500. Sí, me refiero a la Cámara de Diputados, un número exagerado para un país de 112 millones de habitantes, cuando en Estados Unidos hay más de 300 millones y los diputados son tan sólo 424.Estos 500 diputados, junto con 128 senadores, nos costarán este año 10 mil 237 millones de pesos. El sueldo de los diputados, que por ironía le llaman dieta, es de 105 mil 370 pesos mensuales, que si se descontara el Impuesto Sobre la Renta que todo ciudadano debe pagar, quedarían netos 77 mil 745 pesos, pero que absorbe la Cámara dentro de su presupuesto legislativo. Además, tienen las siguientes prestaciones: 12% de ahorro para fondo de retiro, la Cámara aporta otro 12%; 28 mil 772 pesos para ayuda ciudadana; 45 mil 786 pesos por asistencia legislativa, esto es, se les otorga este premio por asistencia, cuando debería descontárseles si no asisten; seguro de gastos médicos mayores, para ellos, sus padres, cónyuge e hijos; dentista, optometrista y lentes gratis; gastos funerarios, igual a un mes de dieta; cupones de avión tarifa alta para cambiar por cuatro boletos mensuales, que se disminuye a tres si están en receso; esto quiere decir, que pueden utilizar los boletos para vacaciones; ayuda terrestre hasta 10 mil pesos mensuales a los que viven en un radio de menos de 300 kilómetros, incluyendo a los que viven en el Distrito Federal; tarjeta IAVE, para no pagar casetas en carreteras de cuota; aguinaldo, vacaciones, ayuda para gasolina, celular y asistentes, coche y chofer; bono de retiro por 1.6 millones (sólo para Senadores.)Por lo que podrá observarse, esta carga tan pesada se viene incrementando cada año, porque son más los que se incorporan al grupo de políticos que viven de nuestro trabajo. Llegará el momento en que todos queramos estar arriba, y entonces ¿quién va a empujar?