Dos magnates entran en pugna

CIUDAD DE MÉXICO.- Dos de los empresarios más poderosos de México están comenzando un duelo frontal a medida que las industrias de televisión y de telecomunicaciones convergen en una sola actividad integrada y endurecen lo que hasta hace unos pocos años era una competencia casi inexistente.

Emilio Azcárraga Jean irrumpió en el mercado de telefonía con su grupo Televisa, en un reto a uno de los hombres más ricos del mundo, Carlos Slim, que lidera el negocio de las telecomunicaciones regionales.

El lunes, Televisa lanzó un plan por mil 440 millones de dólares para comprar 30% de la operadora de telefonía móvil Nextel de México, unidad de la estadounidense NII Holdings. Televisa y Nextel presentaron una propuesta conjunta para adquirir parte de las frecuencias que está licitando México para ampliar la oferta de servicios inalámbricos en el país, una de las prioridades del Gobierno.

"Van a ser dos mamuts peleando. Esperemos que el ganador sea el consumidor", dijo Edgar Amador, un analista financiero independiente de la ciudad de México.
Azcárraga, un joven empresario que suele andar en motocicleta, controla a través de Televisa la mayor parte de la programación de televisión de México.

Los dos empresarios han sido socios en el pasado. No puede olvidarse que Slim fue el socio capitalista que ayudó a Azcárraga a impedir que los muchos herederos familiares, afectivos y de negocios de su padre, Emilio Azcárraga Milmo, terminaran por deshacer el consorcio empresarial. De hecho, todavía lo son, a través de la aerolínea de bajo costo Volaris. Sin embargo, desde hace años se han enfrentado por cuestiones de negocios.

Sus empresas ya compiten en el mercado de telefonía fija y acceso a internet. Pero ahora el campo de batalla es el cuádruple play, la convergencia en paquetes de servicios de televisión de paga, telefonía fija, internet y telefonía móvi, luego de que Televisa anunciara su alianza con Nextel.

Azcárraga tenía sólo 29 años cuando asumió a finales de la década de 1990 la dirección de Televisa, la mayor empresa de medios del mundo hispanoparlante. Ahora tiene 41 años y una fortuna cercana a los mil millones de dólares, de acuerdo con la revista Forbes.

Sus negocios incluyen tres equipos de fútbol profesional (Necaxa, San Luis y su amado América), una cadena de salones de juego (Sport City), empresas editoriales, cadenas televisivas por satélite y de cable y sellos musicales.

La diferencia es de contenidos

"Contenido. Esa es la clave de Televisa al entrar a este mercado", dijo Amador. "Eso es lo que le falta a Slim, y es lo que ha estado buscando y tratando de desarrollar por años".

Slim compró al monopolio estatal de teléfonos Telmex en la década de los noventa, lo reestructuró y lo hizo crecer en México y el resto de Latinoamérica. De esa empresa se originó América Móvil, que hoy en día es la mayor telefónica de celulares de la región.

Telmex tiene 80% del mercado de telefonía fija de México, y América Móvil más de 70% de la telefonía celular local, seguida de lejos por la española Telefónica (Movistar).

Slim tiene 70 años y una fortuna cercana a los 35 mil millones de dólares, según Forbes, que viene principalmente de sus firmas de telecomunicaciones, aunque según la publicación mexicana online Sentido Común, se acerca más a los 59 mil millones de dólares.

En términos de ventas, Televisa es mucho menor que las empresas de Slim, pero la participación de mercado de 75% que tiene en el mercado de la televisión abierta de México le concede una influencia masiva que va desde las campañas electorales hasta las carreras del mundo del espectáculo.

Ofrecer cuádruple play daría a Televisa una ventaja sobre Telmex, que tiene prohibido ofrecer video a través de su red.

"Las empresas más poderosas son los medios", dijo Slim en el 2008. "Yo no veo el poder que tengamos si no nos dejan dar video", agregó.

En enero, Slim lanzó una oferta por más de 20 mil millones de dólares para consolidar en América Móvil las operaciones de su operadora de triple play (televisión de paga, teléfono fijo e internet) Telmex Internacional (Telint), que opera en Sudamérica, así como el control accionario de Telmex. La iniciativa busca convertir a América Móvil en un proveedor de servicios integrados. Pero esa integración de servicios no ocurriría en México.

Por su parte, Televisa podría buscar aumentar su participación en el sector de telecomunicaciones con más adquisiciones, dijo el director de la consultora The Competitive Intelligence Unit, Ernesto Piedras. "Apenas estamos viendo el round 1 o 2. Falta mucho para que concluya la pelea", afirmó. (Reuters)