Diputados chipriotas aprueban el plan ''B''

NICOSIA, CHIPRE (23/MAR/2013).- El plan “B” madura. El Parlamento de Chipre aprobó una serie de medidas alternativas al plan inicial del Eurogrupo que incluyen la creación de un fondo de inversión, la restricción de transacciones financieras y la reestructuración del sistema financiero.

Los diputados aplazaron para hoy el examen de otros cinco textos del plan, de los cuales el más polémico buscaría  establecer una tasa excepcional que podría elevarse a 15%, según la televisión  pública, sobre los depósitos bancarios mayores de 100 mil euros.

El objetivo del plan es reunir al menos los cinco 800 millones de euros que exige la troika a cambio del rescate de 10 mil millones de euros.

Una vez aprobado todo el paquete, el presidente de Chipre, el conservador Nikos Anastasiadis, y los líderes de los partidos políticos volarán a Bruselas para participar en la reunión de los ministros de finanzas de la Eurozona, que se llevará a cabo mañana.

El denominado Fondo Nacional de Solidaridad -que recibió la aprobación unánime de los diputados chipriotas- se conformará con parte de las reservas de los fondos de pensiones y del seguro médico de los empleados públicos.

Además, estará abierto a las donaciones de ciudadanos y empresas privadas, y podría incluir más adelante la oferta de la Iglesia de Chipre de hipotecar sus propiedades e incluso de posibles derivados financieros creados en base a las eventuales ganancias futuras de la extracción del gas.

Este fondo tendrá la potestad de financiar bancos en dificultades e incluso al propio Estado chipriota a través de la emisión de bonos u otro tipo de productos financieros.

El texto legislativo sobre las restricciones a los movimientos de capital, que fue aprobado por unanimidad, pretende evitar una fuga de depósitos en el momento en el que los bancos chipriotas reabran sus puertas, lo que está previsto para el martes.

Según esta ley, el ministro de Finanzas o el gobernador del Banco Central podrán establecer los límites por decreto, una medida que demandaba la delegación de la troika internacional presente en Chipre.

El texto legislativo está especialmente dirigido al Laiki Bank, la segunda mayor entidad financiera de Chipre e intervenida por el Estado desde el pasado verano, y que, según se planea, será dividida en un banco “bueno” y otro “malo”.

El vicepresidente del partido gobernante Averof Neofytu reconoció que la reestructuración de Laiki hace peligrar los 600 millones de euros de las cajas de pensiones depositados en ese banco, pero prometió que se buscará “una solución” para este tema.

Sobre la tasa a los depósitos, que hasta ahora se había descartado, el ministro de Finanzas dijo que “está definitivamente sobre la mesa”.

Aunque no precisó cuáles son las cifras que se barajan para los tipos impositivos ni qué depósitos quedarían gravados, los últimos datos que circulan entre los medios figura un impuesto extraordinario de entre 15% y 20% a todos los depósitos por encima de los 100 mil euros.

Por otro lado, el Piraeus Bank, uno de los mayores bancos privados griegos, anunció la absorción de las filiales de los bancos chipriotas en Grecia, que disponen de unos 20 mil millones de euros en préstamos y unos 14 mil millones en depósitos, lo que supone en torno a una décima parte del sector bancario griego, además de dar empleo a unas cinco mil personas.

FICHA TÉCNICA

Semana de protestas

> Por tercer día consecutivo los ciudadanos chipriotas se manifestaron ante el Parlamento. Se escucharon sobre todo fuertes críticas hacia la falta de solidaridad de la Unión Europea (UE). Las criticas también alcanzaron al presidente Nikos Anastasiadis.

> El principal foco de las protestas se dirigió contra la reestructuración del Laiki Bank, cuyo futuro los ciudadanos ven como incierto, así como el destino de sus  ahorros.

> Los chipriotas manifestaron también su enojo contra Alemania al bajar de su asta una bandera de ese país y dos de Naciones Unidas.

> PREVÉN FUGA DE CAPITALES

El euro le teme a Chipre, afirma ex agregada cultural

Chipre asusta a la Unión Europea. Se teme una fuga de capitales extranjeros de la banca chipriota y con ello un boquete en el sistema financiero europeo.

Cuando Chipre ingresó al Euro en 2004 fue una grave metedura de pata, afirma  María Palomar Verea, ex agregada cultural de México en Grecia. Era una isla partida en dos y ocupada por Turquía en 40% de la mitad Norte. Si  Grecia no era candidata, pues era un secreto a voces que no cumplía los requisitos para entrar a la Zona Euro, mucho menos lo sería un pequeño país como Chipre, que había funcionado como un portaaviones en el Mediterráneo.

Chipre no representa más de 0.2% de la economía europea. Antes que perteneciera a la Unión Europea, se permitió convertirse en una especie de paraíso fiscal. Comenzó a recibir enormes depósitos bancarios de los antiguos países comunistas. Hay mucho dinero ruso, probablemente de origen dudoso y que está depositado en el sistema bancario chipriota. Es impresionante ver la proporción de la deuda, que supera por mucho su Producto Interno Bruto, dice Palomar Verea.

Las relaciones de Chipre con México son muy tenues. Es un país con el que no se tienen grandes intercambios.

La de Chipre es una crisis grande, como sería el hundimiento de la banca española, afirma Palomar Verea