GUADALAJARA, JALISCO (09/ENE/2017).- Mientras que en algunas zonas enviar los desechos al drenaje es tan fácil como jalar una palanca, en otros sitios es imposible y representa un riesgo sanitario pues falta dicho servicio. Esta situación es abordada por Dry-nergy, un colectivo que trabaja en una alternativa para esta necesidad y al mismo tiempo ofrece un beneficio ambiental.Dry-nergy trabaja en la elaboración de un “baño seco”, es decir, una cabina diseñada para no utilizar agua para eliminar los desechos del excusado. Además, el “baño seco” también servirá como contenedor de los mismos residuos y de la orina, que serán separados y almacenados para generar otros materiales orgánicos, como fertilizante o composta.“Es una cabina donde dentro está un excusado separador de líquidos y sólidos, y a partir de estos dos desechos podemos generar composta con los desechos sólidos, biogás en un futuro y con la orina podemos generar fertilizante o también sustraer la urea de la orina y comercializarlo con farmaceúticas”, explica Elizabeth González, miembro del equipo de diseño y producción de Dry-nergy.Los jóvenes de este colectivo buscan llevar este proyecto a las colonias vulnerables de la metrópoli, sobre todo a aquellas áreas que carecen del servicio de drenaje.Dry-nergy platicó con vecinos de la colonia Agrícola, de Zapopan, para presentarles esta alternativa y así se evite la construcción de fosas.“Íbamos yendo a visitar a la gente y preguntábamos qué problemas o quejas tenían y uno de ellos era la falta de drenaje, que a partir de ello construían fosas en sus hogares y decidimos concentrarnos en eso. A partir de ahí desarrollando la idea surgió lo de un baño seco”, relata Enrique Rubio, encargado de posicionamiento de Dry-nergy.A partir de esta problemática este colectivo decidió apostarle por la construcción de los baños secos. Karina González, otro miembro del colectivo, asegura que además de ayudar a brindar un servicio sanitario también se implementa una alternativa para utilizar los desechos y convertirlos en fertilizantes y composta para comercializarlos o ser destinados para uso propio.“Las personas están emocionadas, aunque al inicio dicen ‘oye, cómo va a ser el contacto con los desechos’ y les explicamos y les empieza a agradar, porque también pueden hacer composta para sus huertos o venderla, y eso es como tener una ganancia para ellos”.La idea de implementar este proyecto surgió luego de una serie de cursos sobre emprendimiento social. Posteriormente Dry-nergy logró ganar una convocatoria de Social Lab, plataforma que impulsa la innovación social, por lo que ahora buscan consolidar este modelo de alternativa urbana para baño.Una vez que alcancen su meta, los miembros del colectivo fabricarán los primeros prototipos, que buscarán posicionar entre la población vulnerable a través de microcréditos.El costo de esta cabina ecológica podría oscilar los cuatro mil pesos, según estimaciones de los integrantes de Dry-nergy.NAVEGAConoce esta iniciativa• Facebook.com/DryNer-gy • Twitter.com/DryNergy • bit.ly/drynergy