Voltereta, drama y bronca

Con una voltereta que tuvo su dosis de fortuna y con un poco de dramatismo, pues terminó con 10 elementos, Cruz Azul consiguió un triunfo 2-1 sobre Chiapas para un global de 2-2 y así avanzó a semifinales por mejor posición en la general, en un encuentro que terminó con bronca.

Los celestes echaron por el suelo el peso que tenían las estadísticas, al no poder levantarse en ocho ocasiones anteriores de una desventaja en la ida, pero ayer, con gol del paraguayo Pablo Zeballos (72) y autogol del portero Édgar Hernández (74’), consiguieron su segundo pase al venir de atrás para seguir con vida.

El equipo chiapaneco se había ido adelante con gol del brasileño Itamar Baptista, al 48’. El partido terminó con dos expulsados de Jaguares, el chileno Ismael Fuentes (91’), por codazo a Miguel Sabah, y el brasileño André Luiz (92’), por manotazo a Gerardo Torrado.

Las ilusiones que mantenía la afición cruzazulina por revertir la ventaja sufrieron un golpe muy fuerte apenas al 48 cuando Baptista remató frente al arco un servicio del costarricense Óscar Rojas, quien había escapado por la izquierda, para colocar el marcador global 2-0 a favor de los chiapanecos.
Por ello, al técnico uruguayo Sergio Markarián no le quedó de otra más que meter a dos hombres más de ataque, el paraguayo Pablo Zeballos y a Jaime Lozano en busca de abrir espacios y obtener el empate.

Chiapas mantuvo su esquema defensivo en busca de algún otro contragolpe para liquidar al cuadro de casa, que pasados los minutos no encontraba como anotar un gol.

Pese a todo, los celestes no bajaron los brazos y en una genialidad del paraguayo Pablo Zeballos y en pase de Jaime Lozano para el guaraní, éste sorprendió al portero Hernández con un taconazo dentro del área para lograr el ansiado empate en el 72’, que provocó alegría en las tribunas.

Y si antes les había faltado una dosis de ella apareció en el 74’ cuando a pase filtrado de Torrado por derecha, Miguel Sabah disparó, el balón pegó en el poste izquierdo y rebotó en la cabeza del portero Hernández para irse al fondo y entonces se puso adelante en el marcador 2-1 y empató el global 2-2, suficiente para meterse a las semifinales.

Para ponerle dramatismo al juego, la Máquina se quedó con 10 en el 84’ cuando se fue expulsado el medio de contención paraguayo Cristian Riveros por una barrida en medio campo sobre el brasileño Andre Luiz, que le mereció su segunda tarjeta amarilla. 

Se jugaba tiempo de compensación cuando el zaguero chileno Ismael Fuentes dio un codazo a Miguel Sabah cuando éste trataba de robarle el esférico en el círculo central y el silbante le mostró la segunda amarilla.

Jugadores de uno y otro equipo se arremolinaron en el lugar y el brasileño André Luiz dio un manotazo en el rostro a Gerardo Torrado para que el silbante también le sacara roja directa. Vinieron entonces algunas patadas sin balón y corretiza sobre Gerardo Lugo, a quien le dieron varios golpes.

Se metieron al campo elementos de las bancas y mientras los jugadores celestes trataban de calmar la situación algunos de Jaguares persiguieron por momentos a Lugo y a Julio César Domínguez, mientras Gerardo Torrado era resguardado por otros compañeros, pues Fuentes lo buscaba con insistencia, mientras Rojas andaba en busca de los dos primeros. 

El timonel de la Máquina, Markarián, no dio buen ejemplo al también participar por momentos en el altercado.
Los jugadores de ambos equipos se fueron a su respectivo vestidor y aunque no se terminaban de jugar los cuatro minutos que dio de compensación el árbitro Hugo León, éste decidió dar por terminado el encuentro.