Unidos por una final perdida

CIUDAD DE MÉXICO (28/NOV/2012).- Poco más de 15 años ha pasado desde aquel 1 de junio de 1997, una fecha que Enrique Meza y Antonio Mohamed tienen como un recuerdo amargo y por demás triste.

Los ahora estrategas del Toluca y Tijuana que viven con incertidumbre los momentos previos a la gran final del Apertura 2012, han sido alcanzados por el fantasma del pasado, pues los dos enfrentamientos que tendrán por la disputa del título hacen inevitable voltear hacia atrás y recordar el último capítulo que sufrieron juntos.

Meza fungía en ese entonces como entrenador del mítico Toros Neza, mientras que el “Turco” lo hacía como orquestador en la cancha y ambos se alistaban para el que hasta ese momento era el partido más importante de sus carreras: la vuelta de la final del Verano 97 ante Chivas de Ricardo Ferretti.

Los primeros 90 minutos habían resultado apretados, con un 1-1 que dejaba las emociones para el último encuentro que tuvo como escenario la cancha del Jalisco. El encuentro comenzó igual y el marcador no se movió al finalizar la primera parte, por lo que el nerviosismo afloraba al correr los minutos. Fue entonces cuando al minuto 50, Gustavo Nápoles iniciaría su feria de goles, mismos que le harían vivir un verdadero infierno a Toros Neza. Cuatro anotaciones de Nápoles, una de Paulo César Chávez y otra de Manuel Martínez bastaron para humillar al conjunto del “Ojitos” que apenas y alcanzó a meter las manos con el de la honra de Germán Arangio, sin embargo no fue suficiente.