Una víctima más de Vergara

GUADALAJARA, JALISCO.- Misma telenovela, mismo antagonista, cambio de protagonista y un mismo final. Así se resumen las últimas semanas en la carrera deportiva de Ramón Morales, quien decidió dejar las canchas seis meses a pesar de que tenía contrato con Chivas.

La historia se asemeja a varias por la que pasaron jugadores, técnicos y hasta directivos del Rebaño desde que Jorge Vergara asumió la presidencia.

Ramón Ramírez y Oswaldo Sánchez abandonaron en no muy buenos términos la institución rojiblanca. Al igual que al "moncho", Ramírez no quería dejar el club y al final lo tuvo que hacer.

Omar Bravo y Adolfo Bautista también llegaron a tener diferencias con el controvertido directivo. Ambos regresaron a la institución después de acabar con los dimes y diretes que hubo durante meses.

Y con los técnicos pasó una situación similar: con Daniel Guzmán, Eduardo de la Torre, Benjamín Galindo, José Manuel de la Torre, Hans Westerhoff, Efraín Flores, Omar Arellano y recientemente Paco Ramírez.

Todos llegaron a tener algún altercado con Vergara, que al final les costó abandonar el timón. El más sonado fue el de Galindo quien había tenido un regular desempeño en el torneo local, pero había hecho bien las cosas en Copa Libertadores. Pese a ello, se prescindió de sus servicios ya que no estaba de acuerdo en que los jugadores fueran contratados como "animadores" para fiestas.

Los directivos tampoco se han salvado. De ser su mano derecha, de un momento a otro Juan José Frangie abandonó el club sin explicación alguna, al igual que Pedro Sáez.

A pesar de que abandonó por una oferta para estar en la Comisión de Selecciones Nacionales, Néstor de la Torre tampoco dejó en buenos términos el club.

Esta vez, a Ramón Morales le tocó la guadaña, pero seguramente no será el último.