Un problema explosivo en la F1

GUADALAJARA, JALISCO (04/JUL/2013).- La carrera de Silverstone rompió un récord en la historia: cinco llantas explotaron durante la carrera, todas traseras izquierdas. Al respecto, Pirelli hasta el momento no da una información específica sobre la causa de los cinco neumáticos reventados el pasado fin de semana en el GP de Gran Bretaña, aunque se habla presión y de cámber (ángulo de inclinación de las ruedas); en Silverstone afirman que el lomo de las curvas, a las cuales culpaban, no sufrió modificaciones desde la última carrera de F1, tampoco hubo problemas en las categorías inferiores, descartando que sea culpa del circuito.

Los observadores culparon al proceso de unión de las llantas con los cinturones de acero, estrenado en las llantas que se emplearon en Silverstone como el culpable, cosa que negó el director de Pirelli Motorsport, Paul Hembery.

Pirelli declara que es muy temprano para acusar a algún componente de las llantas, aunque en Nurburgring se usarán llantas posteriores que sustituyen el nuevo cinturón de acero por uno de Kevlar, construcción semejante a la empleada el año anterior. El Kevlar es más resistente que el acero, pero presenta diferencias en cuanto a temperaturas y flexibilidad, así que no es tan sencillo como quitar una pieza de la línea de fabricación y poner otra.

Ante un problema nuevo como fueron las explosiones, que no tienen nada contentos a los jefes de escuderías que vieron sus esfuerzos frustrados por un componente con especificaciones 2013, la solución parece ser emplear las respuestas y fórmulas de 2012.

Se especula que al haber salido el piso de los neumáticos en una pieza y con forma de rectángulo, el problema provino de la fabricación. El razonamiento es que las fracturas no saben de geometría, pero la fabricación sí; es de esperarse que Pirelli no arriesgará más su imagen ante el consumidor aclarando esto, aunque las llantas de F1 sean tan parecidas a las llantas que compramos los mortales comunes, como lo puede ser cualquiera de los componentes de estos autos.

Una de las primeras sugerencias de Pirelli en la carrera de Silverstone, fue elevar la presión de los neumáticos (habían especificado 19 libras), cosa que algunos equipos hicieron, pero ese cambio se vio hasta la segunda o tercera parada, de forma que no es posible siquiera especular si algo se evitaba con este remedio.

Nurburgring es una incógnita en este momento. Las nubes de tormenta se descargarán si hubiera otro incidente similar, aunque se tratara de un solo reventón, por no hablar de una tragedia a nivel personal que nadie desea y sólo la suerte y los buenos reflejos de los pilotos la alejaron de la historia de la competencia en Inglaterra.

EN RESUMEN

Cómo queda la situación

> Pirelli asegura que el desprendimiento de la banda de rodadura quedó atrás y fue solucionado mediante un proceso de fabricación en el modo de fijar dicha banda a la carcasa, por lo que, lo de Silverstone, fue un fenómeno diferente.

> Según el análisis de Pirelli, los equipos montaron las llantas de forma incorrecta, invirtiéndolos, en una práctica que todos, incluido Pirelli, pasaron por alto y no se prohibió, ya que la construcción del neumático es más resistente de un lado.

> La baja presión de las llantas y los ángulos de caída fueron factor para que las llantas reventasen. Hay que recordar los ángulos o inclinación de la llanta son valoradas por los equipos, de acuerdo a los parámetros y dependiendo de la pista.

> Pirelli asegura que los componentes de 2013 no implican riesgo ni comprometen la seguridad de los pilotos “si todos se usan de forma correcta”, y por lo tanto cumplen con las especificaciones de la FIA.

> Para el GP de Hungría, Pirelli se apoyará en los neumáticos de 2012, que “vendrán a reforzar los compuestos estrenados en Canadá y que demostraron ser fiables”. Antes, en este GP de Alemania, se utilizará una banda de rodadura de Kevlar, que sustituye al acero, para las llantas posteriores. Esto, vendrá a “tocar” la dinámica y el comportamiento del monoplaza.

¿Afecta esto la imagen comercial de la marca italiana?

Las llantas son el único contacto que un monoplaza tiene con el suelo. Al reventarse una, el piloto se enfrenta a una peligrosa situación, ya que debe controlar el auto en alta velocidad. Lo mismo sucede en la calle, cuando una llanta de cualquier coche se revienta el peligro es inminente. Por esto, ante el mundo, la marca italiana Pirelli está claramente perdiendo reputación y tiene que apurarse en salvar su imagen, antes de que sea demasiado tarde.

La gente podría pensar que las llantas Pirelli en general son de mala calidad, aunque en realidad no lo son, ya que por algo llegaron a ser consideradas como proveedor único para la Fórmula Uno. El que la simple charla de café sea para hablar mal de tu producto, ya es una pérdida económica para la empresa. Sin embargo, a pesar de que han sido dos años buenos para Pirelli (2011 y 2012) y este tercer año muy malo, aún no se pone en tela de juicio su calidad como fabricante de neumáticos a escala mundial.

Pero, Pirelli, se está formando una opinión y no es muy favorable. Lo que debe hacer la marca, es restaurar su reputación lo más pronto posible y al parecer en Hungría vendrán (otra vez) esos cambios de fondo para las llantas. Habrá que ver qué condiciones presentan, ya que las variables técnicas y desempeño de un monoplaza cambian de una llanta a otra y esto pondrá a trabajar horas extras a los ingenieros.

Por otro lado, para averiguar qué tanto impacto tiene esta situación con los clientes de Pirelli, EL INFORMADOR contactó al proveedor de estas llantas en Guadalajara, para saber si existe alguna inquietud acerca de la imagen que están proyectando en la Fórmula Uno y, de acuerdo al Gerente de mayoreo de Grupo Loyga, Miguel Ángel López, “las ventas siguen normal y no han mermado. He visitado las instalaciones de la planta de Pirelli en Silao, Guanajuato y la compañía sigue las más estrictas normas de seguridad y calidad en la producción, por lo que nuestros clientes pueden estar tranquilos con sus llantas”.

Este medio intentó localizar a algún representante de Pirelli en sus oficinas corporativas, sin éxito, por lo que al parecer la marca guardará silencio, al menos hasta que las aguas vuelvan a su cauce, esperemos, por el bien de Pirelli.

EL INFORMADOR/ ADRIÁN CASTAÑEDA Y MARIO CASTILLO