Todos contra Francia, en Mundial de Balonmano español

GRANOLLERS, ESPAÑA (10/ENE/2013).- Francia, gran dominadora del balonmano mundial es las últimas dos décadas, buscará a partir del viernes una quinta corona en el Mundial que se disputará en España, un objetivo que tratarán de impedir el resto de las grandes potencias de este deporte.

De lograr el título, los franceses, dobles campeones olímpicos, se convertirían en la primera selección en tener cinco coronas mundiales, sumando los éxitos obtenidos en 1995, 2001, 2009 y 2011.

Los otros dos países con cuatro títulos mundiales, Suecia y Rumanía no estarán presentes en el campeonato de España, por lo que la selección anfitriona y Dinamarca se presentan como los principales adversarios de los franceses.

Victoriosos en las dos últimas ediciones, los conocidos en Francia como los "Expertos" podrían convertirse también en el primer país a sumar tres títulos consecutivos, en lo que seguramente será el último gran torneo de algunos de los hombres clave que han llevado a Francia a los éxitos de los últimos años.

En esta situación se encuentran el capitán Jerome Fernandez (de casi 36 años), Didier Dinart (cumplirá los 36 el 18 de enero) o el portero suplente Daouda Karaboué (37 años).

Para los franceses, el campeonato del mundo es la ocasión también de lavar la imagen de este deporte en su país, después del caso de apuestas ilegales que salpicó a la gran estrella gala, Nikola Karabatic, además de su compañero Samuel Honrubia, y del lamentable episodio protagonizado por el equipo tras su triunfo en Londres-2012, destrozando en directo el plató de L'Equipe TV durante una entrevista.

El seleccionador Claude Onesta ha dado entrada a sangre nueva en el equipo, con las incorporaciones de Timothey N'Guessan (20 años) y de Valentin Porte (22 años), que entra por el campeón olímpico Guillaume Joli, la gran sorpresa de la convocatoria francesa.

El cambio de la fórmula de competición, introduciendo las eliminatorias directas a partir de la primera fase, pueden dar lugar a más sorpresas.

España, que se proclamó campeón del mundo en 2005, han subido al podio con regularidad en las últimas grandes competiciones y se presentan como el principal rival de Francia, junto a Dinamarca, que a punto estuvo de ganar a los franceses en la final de hace dos años (37-35, tras prórroga).

Un total de 24 equipos tomarán parte en el torneo, encuadrados en cuatro grupos de seis países cada uno. Los cuatro primeros clasificados de cada llave pasarán a octavos de final, enfrentándose en partidos de clasificación directa hasta la final.

El continente sudamericano contará con tres participantes (Argentina, Brasil y Chile) aunque con ninguna posibilidad de ganar en un deporte donde siempre han dominado los países europeos.

Argentina y Brasil están encuadrados en la llave A, con sede en Granollers (cerca de Barcelona), junto a Francia, Alemania, Montenegro y Túnez. Solo franceses y alemanes parecen inalcanzables para los sudamericanos, que podrían tener opciones de pasar a los octavos y enfrentarse a alguno de los cuatro primeros clasificados del grupo B, con sede en Sevilla.

En esa llave quedó Chile, que en su segunda participación en un Mundial espera mejorar el puesto 22 logrado en su estreno, aunque no parece tener opciones de clasificarse para los cruces, teniendo en cuenta el potencial de sus adversarios: Dinamarca, Islandia, Macedonia, Catar y Rusia.

Los otros dos grupos son los siguientes: Arabia Saudita, Bielorrusia, Corea del Sur, Polonia, Serbia y Eslovenia en el C, con sede en Zaragoza; Argelia, Australia, Croacia, Egipto, España y Hungría, que jugarán en Madrid.

La ceremonia de inauguración se celebrará el viernes a partir de las 17h00 GMT en la Caja Mágica de Madrid y posteriormente se disputará el primer partido, entre España y Argelia (18h00 GMT).

Las semifinales y la gran final se celebrarán en el Palau Sant Jordi de Barcelona, el 25 de enero y el 27, respectivamente.