Sudáfrica realizará sus propios análisis a Semenya

JOHANNESBURGO, SUDÁFRICA.- El ministro de deportes de Sudáfrica, Makhenkesi Stofile, informó que el gobierno apoyará para realizar sus propias pruebas de sexo a la actual campeona mundial de 800 metros, Caster Semenya.

Y es que después de que diferentes medios internacionales publicaron que los resultados de las pruebas realizadas por parte de la IAAF son en el sentido que Caster es hermafrodita, Stofile aseguró que se han violado los derechos humanos de la deportista, primero por cuestionar su sexo y posteriormente por filtrar a los medios supuestos resultados de pruebas médicas.

"Han indicado que es hermafrodita, pero para mí, eso no significa nada, al contrario, eso es desagradable y poco ético", argumentó el ministro de deportes de Sudáfrica a la prensa de Pretoria.

Caster Semenya, quien hace unos días declaró que "yo lo veo como una broma, no me molesta", fue sometida a exámenes de sexo en su país antes de dar inicio a los Mundiales de Berlín, Alemania, mismos que arrojaron que la atleta poseía niveles de testosterona tres veces arriba de los valores normales en una mujer.

El día de hoy, los medios internacionales publicaron que Semenya carece de útero, y en vez de ovarios tiene testículos internos, lo que hace que produzca una elevada cantidad de testosterona.

"Estoy defraudado por la forma en que se ha manejado este asunto y por quienes tienen intereses creados. Ella es una niña que está disfrutando de su crecimiento", añadió Makhenkesi.

Al mismo tiempo aseguró que le declararía la "guerra" a la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAFF) si su decisión final es excluir de próximos eventos a la sudafricana, además de quitarle el título que consiguió en Berlín y dar una segunda medalla de oro a la keniana Janeth Jepkosgei, que fue segunda en la misma prueba, como lo han publicado los medios.

Todo esto, con la intención de asentar los resultados que han salido a la luz, de manera que Semenya de 18 años de edad continúe con su exitosa carrera deportiva, como lo ha hecho hasta ahora, porque para los sudafricanos, empezando por el presidente Jacob Zuma, la decisión es "improcedente e injusta" .

"Iremos a los más altos niveles a rebatir la (eventual) decisión", finalizó Makhenkesi.