Se entrega presidente de federación de futbol de Ecuador

QUITO, ECUADOR (04/DIC/2015).- El presidente y el secretario de la Federación Ecuatoriana de Futbol (FEF) se entregaron el viernes ante la justicia de Ecuador para declarar en una indagación abierta por la fiscalía luego la justicia estadounidense denunciara un caso de corrupción en la FIFA, informó el viernes la fiscalía.

Un juez dispuso la orden de detención y el congelamiento de los fondos de las cuentas bancarias del presidente de la FEF, Luis Chiriboga, y otras dos personas, señaló la fiscalía general en un comunicado.

También están siendo indagados el secretario de la FEF, Francisco Acosta, y el director de Logística de la selección mayor, Vinicio Luna, quien fue detenido, de acuerdo con la fiscalía.

A su llegada a Quito el viernes por la noche tras su viaje oficial a Francia, el presidente Rafael Correa se refirió de manera escueta al caso: "Que se hagan las investigaciones que se tengan que hacer, sin favor ni temor".

La Fiscalía indicó a través de su cuenta en Twitter que Chiriboga y Acosta "se entregaron" para investigaciones, dentro de las cuales rendirán su "versión libre y voluntaria".

"Vengo voluntariamente a colaborar con la fiscalía", expresó Chiriboga a periodistas al acudir a ese organismo en Quito.

La Policía informó por Twitter que agentes de unidades especiales "hicieron efectiva detención" de Chiriboga y Luna por el presunto delito de lavado de activos.

Entretanto, el directorio de la FEF resolvió por unanimidad, en una sesión extraordinaria, suspender por 90 días a su titular debido a la indagación judicial y expresó su disposición a colaborar con las investigaciones.

La abogada de Chiriboga, Lucía Vallecilla, dijo que "estamos en una orden de investigación por 24 horas" y que luego de ese tiempo "inmediatamente se inicia la instrucción fiscal", la cual puede extenderse hasta por 90 días con detención.

Las autoridades también allanaron la casa de Acosta y de la FEF en el puerto de Guayaquil (suroeste).

Previamente, el fiscal general, Galo Chiriboga, manifestó en rueda de prensa que el congelamiento pesa sobre "las cuentas personales de los funcionarios de la Federación Ecuatoriana de Futbol, pero no son cuentas de la Federación, son cuentas personales de varios funcionarios".

La justicia estadounidense inculpó el jueves a otros 16 altos responsables y exfuncionarios de la FIFA y asociaciones nacionales latinoamericanas, entre ellos los presidentes de la Conmebol y la Concacaf, ambos detenidos en Suiza, por el caso de corrupción que sacude desde mayo a la organización.

La denuncia, que salpica a Luis Chiriboga, incluye pedidos y pagos de sobornos por "más de 200 millones de dólares para vender derechos de retransmisión y marketing de torneos y partidos internacionales de futbol", afirmaron las autoridades.

El fiscal ecuatoriano, quien no tiene parentesco con el máximo representante de la FEF, señaló que supuestamente son delitos que se han cometido en el país, por lo que la justicia ecuatoriana "tiene pleno derecho constitucional para investigarlos".

"De acuerdo a nuestro sistema constitucional, el Ecuador no permite la extradición de ciudadanos ecuatorianos, pero asume la responsabilidad de investigar los delitos que incluso los ecuatorianos hayan cometido en el exterior para procesarlos aquí", declaró.

El fiscal puntualizó que si ecuatorianos que pudieran estar involucrados en el caso de corrupción en la FIFA son requeridos por otras naciones "que por norma constitucional el Ecuador no permite la extradición de sus connacionales, pero sí asume la obligación de juzgarlos aquí".

Luis Chiriboga es miembro del Comité Ejecutivo de la Conmebol y preside la FEF desde 1998. En su administración, Ecuador clasificó a los mundiales de 2002, 2006 y 2014.

En junio pasado, la fiscalía ecuatoriana anunció que examinaría si la FEF está implicada en el escándalo de sobornos de la FIFA y pidió información a Estados Unidos.

Empero, la justicia estadounidense respondió en octubre que "no podía atender el requerimiento (...) ya que de hacerlo interferiría con el desarrollo de las investigaciones en los Estados Unidos", de acuerdo con la fiscalía.