No hubo hazaña

Falló el partido perfecto. No se pudo. Los errores defensivos cometidos por Guadalajara fueron directos al marcador y bien aprovechados por Monterrey, en el partido de vuelta de los cuartos de final del Clausura 2008, disputado anoche en el Estadio Jalisco.

Guadalajara tuvo la ventaja, pero al final fue un empate 4-4 que permitió a los Rayados avanzar con un global de 5-8.

Chivas inicio con intensidad, actitud, determinación, controló el esférico, tuvo posesión y fue en busca de los tres goles que requerían para avanzar a semifinales.

Corría el minuto 14 cuando Chivas se fue al ataque, Omar Bravo recibió excelente pase de Sergio Santana dentro del área para sacar disparo a quema ropa que pegó en el travesaño y que pico en zona de gol. Por si fuera poco y para que no quedara duda, el balón le quedó a merced a Alberto Medina, quien cabeceó de manera impecable para vencer a Jonathan Orozco. El gol se lo dieron a Bravo.

Los rojiblancos apretaron, querían acortar aún más la desventaja de dos goles, pero corrían muchos riesgos al dejar espacios, lo cual esperaba Rayados con ansias para anotar en un contragolpe. Lo planeado por Rayados llegó al 21’, en un error de la defensa rojiblanca que dio todas las concesiones a Carlos Ochoa, quien hizo pared con Borgetti, entró solo al área, enfrentó a Michel y lo venció por abajo.

Chivas volvió a ser presa de sus propios errores. La defensa se equivocó de nueva cuenta al 24’. Jared Borgetti entró solo al área, cedió el balón a Jesús Arellano, quien solamente cacheteó a la derecha de Michel para anotar. El partido estaba de ida y vuelta, se jugaba en las áreas.

Chivas no bajó los brazos nunca, por el contrario, siguieron con la misma determinación con la que iniciaron el cotejo y encontrarían al 27’ la recompensa a su insistencia. Édgar Solís mandó centro al área que el “Venado” Medina remató de cabeza, puso el balón en el rincón derecho del arco de Orozco. Chivas requería nuevamente de tres goles.

Efraín Flores, técnico del Guadalajara, fue expulsado antes de finalizar el primer tiempo por reclamarle al cuarto oficial José Gómez, algunas decisiones arbitrales.

El segundo tiempo inició como el primero, con Chivas desbordado al ataque y arriesgando, porque atrás quedaban los defensores mano a mano con los delanteros regios.

En el 63’, Michel salió por la banda derecha con Magallón, quien recorrió casi todo el campo, llegó a las afueras del área, hizo pared con Sergio Ávila, quedó de frente al arco y sacó disparo potente que Orozco no pudo contener, el balón quedó a merced de “Gaucho” Ávila, quien nada más empujó el balón. El “Rebaño Sagrado” requería de dos goles más.

Todo término al 79’, cualquier esperanza que había la sepultó Ervitti. Ordaz se aviva en un saque de banda, la defensa del Guadalajara se duerme en un error grave, ya que nunca reaccionaron y dejaron solo a Ervitti dentro del área, quien recibió, controló, enfrentó a Michel y lo fusiló.

Para hacer más decoroso el marcador, Magallón, en un tiro de esquina, conectó de cabeza para mandar el balón al fondo de la red, cuando ya estaba todo definido.

Monterrey respondió de inmediato por conducto de Carlos Ochoa, quien se fue solo por la banda derecha, llegó al área, enfrentó a Michel y con tiro cruzado a ras de pasto, cerró la cuenta para empatar el encuentro a cuatro tantos.

Alineaciones

Chivas: Luis Michel, Omar Esparza, Francisco Rodríguez, Héctor Reynoso (Omar Arellano, 52’), Jonny Magallón, Édgar Solís, Gonzalo Pineda (Marco Fabián, 67’), Sergio Ávila (Javier Hernández, 78’)  Alberto Medina, Omar Bravo y Sergio Santana.

Monterrey: Jonathan Orozco, Severo Meza, Diego Ordaz, Felipe Baloy, Egidio Arévalo, Joel González, Walter Ervitti, Luis Pérez (William Paredes, 46’), Carlos Ochoa, Jared Borgetti (Robert de Pinho, 65’) y Jesús Arellano (Paulo Serafín, 65’).