Los voy a convencer: Eriksson

CIUDAD DE MÉXICO.- Inmutable, sin descubrir una gota de sudor, Sven-Göran Eriksson se muestra serio frente a la percepción que la afición mexicana tiene de su trabajo. Respetuoso, reconoce que tanto él como la Selección Nacional que dirige, procurarán modificar la opinión que tienen de su trabajo y para ello adelanta que el Tri está capacitado para desarrollar un buen encuentro contra Costa Rica, el próximo sábado.

“Lo bonito del futbol es que todos tienen su opinión. Esto es bueno, porque el impacto del futbol debe continuar siempre, cada día. Toca a nosotros, como cuerpo técnico y como jugadores, cambiar la opinión de la gente”, responde el sueco, enterado de que 48% de los aficionados tiene una opinión desfavorable de él, resultado de la encuesta nacional elaborada por la Coordinación de Investigación y Opinión Pública de EL UNIVERSAL, que se publicó ayer.

“Tenemos una gran ocasión el sábado y claro estamos trabajando para jugar bien también”, agrega Sven-Göran, serio tras admitir que conoce los resultados del estudio.

Sin embargo, Eriksson aclara que “el futbol no es ciencia, no es computadora”, sino emociones y espera que la transformación del Tri se produzca a través de esos factores que involucran al deporte de las patadas.

“Perdimos el primer encuentro en este grupo de clasificaciones. Entonces, en el segundo juego es muy importante conseguir el resultado, es la cosa más importante. Pero igualmente nos interesa, si podemos jugar bien también. Creo que podemos jugar bien, tenemos tres o cuatro entrenamientos antes del sábado y soy muy optimista”.

Sabe Sven que en una fase eliminatoria, “cuando estás jugando en un grupo de clasificación, es muy malo que tu comiences con dos derrotas, así que el resultado del sábado es muy importante”, insiste.

La encuesta arroja además que los principales responsables del mal paso de la Selección son los jugadores.

Eriksson está preocupado, sobre todo, por que el equipo tenga capacidad de anotar frente a los ticos, algo que le ha costado resolver a Eriksson.

“No estoy preocupado. Soy optimista, porque los muchachos están trabajando bien. Claro, pensando cómo va a ser el juego del sábado, es cierto, nosotros tenemos que atacar mucho. Claro que tenemos que hacer goles, es muy importante. No voy a decir que estoy preocupado, pero esto es muy importante para nosotros marcar el sábado”, acepta.

Afectado por la crítica, Eriksson explica que prefiere, sin embargo, vivir ese entorno, a formar parte de un equipo que no le interese a nadie.

“A mí me gusta el trabajo. A veces soy muy criticado cuando los resultados no vienen, pero es mejor que así sea, que entrenar a un equipo que no le importe a nadie. Es muy bonito ser entrenador de un equipo que genera expectación, eso es mucho mejor. Claro, lo preferible sería hacer un futbol bonito… Así que no quiero cambiar el trabajo con nadie, estoy muy bien así”, remata el sueco.

La afición comparte el optimismo del entrenador. Según el estudio publicado ayer, 78% de los seguidores del equipo piensa que van a ganar el partido del sábado ante Costa Rica.

Y aunque considera que cuenta con el respaldo de la Federación Mexicana de Futbol, también conoce las reglas del juego, porque “nunca alguien de Federación me ha engañado”.

Lo que sí tiene muy claro es que México ofrecerá un rostro distinto, de un cuadro que piense en agradar, y a la vez que busque el marco rival.

“En el entrenamiento vimos muchas cosas buenas y por eso pienso que vamos a jugar bien también”.