La excepción a la regla

Es un gusto, en verdad, saber que es cuestión de horas para que se ponga en marcha la campaña 2010 de la Fórmula Uno. Ya era justo y necesario.

La temporada 2009 fue de esas donde los aficionados no pudieron quejarse. La categoría se sacudió, viendo cómo los grandes (Ferrari y McLaren) batallaban, mientras que los “chicos” saltaban a los primeros sitios (Brawn GP arrasando con los títulos de pilotos y constructores, seguidos muy de cerca por Red Bull).

Ahora, amigo lector, frótese las manos. Porque el cambio a las reglas del juego, rostros familiares en equipos diferentes, el regreso de un histórico como Michael Schumacher y la llegada de una nueva generación de pilotos abre la posibilidad de que la guerra esté más peleada que nunca.

Guerra de egos en McLaren y Ferrari.- Hace poco más de 20 años, McLaren hizo una apuesta por tener a dos “peces gordos” en sus filas, Alain Prost y Ayrton Senna. El tiro casi les sale por la culata.

Los egos de ambos eran tan grandes, que no cabían en la misma habitación. Senna sacó la mejor parte, con los títulos mundiales en 1998 y 1989, este último salpicado por el polémico choque entre ambos en Suzuka (que se repetiría un año después, ya con Prost manejando para Ferrari).

¿Qué le espera ahora a McLaren? Tiene en sus filas a Lewis Hamilton (protegido por Ron Dennis ) y al actual campeón, Jenson Button, quien busca mantener el respeto ganado hace un año, luego de una década gris en la F1. ¿Le espera una nueva turbulencia a la escudería británica?

Y un papel similar podría darse en Ferrari. Fernando Alonso llega como la gran contratación de la Scuderia, compartiendo pits con Felipe Massa, quien no luce muy dispuesto a hacer labores de sacrificio cuando apenas hace dos campañas se quedó a nada de proclamarse campeón.

Terminó la espera. Es turno de que los pilotos hablen en la pista.

La respuesta a la trivia.- Michael Schumacher debutó como piloto de Fórmula Uno, en el Gran Premio de Bélgica 1991, con la escudería Jordan, en sustitución de Bertrand Gachot.

Días antes de la carrera en Spa-Francorchamps, Gachot fue encarcelado por un incidente donde roció gas lacrimógeno a un taxista en Londres. El piloto estuvo en prisión dos meses.

Schumacher calificó séptimo para el GP de Bélgica, aunque se retiró en la primera vuelta por una falla mecánica.

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