GUADALAJARA, JALISCO (15/AGO/2016).- Los Juegos Olímpicos de Río han sido escenario de diferentes manifestaciones de los deportistas, imágenes que van desde muestras de amor, rivalidad, y sobre todo, de amistad entre los competidores. Este último fue un ejemplo sucedido en las pasadas pruebas de equitación individuales.En la exhibición de uno de los deportes más nobles de las Justas deportivas, los jinetes deben mostrar el adiestramiento de sus caballos, pero además es importante el cuidado del animal. Esto fue lo que demostró Adelinde Cornelissen, una competidora de Holanda.Cornelissen se dio cuenta de que su caballo, ''Parzival'', tenía un extraño comportamiento antes de la competencia, motivo por el cual ella eligió bajar a la arena para saludar al público y despedirse. Es decir, dejó la competición para salvar al equino que se mostraba enfermo.En Facebook, la jinete informó que ''Con tal de protegerlo, decidí renunciar... Mi amigo, el caballo que lo ha dado por mí toda su vida no se merece que lo ponga en peligro''.La atleta de 39 años es ganadora de una medalla de bronce y otra de plata en la justa de Londres 2012, tanto en lo individual como en equipos.Para la suerte de la atleta, ''Parzival'' está completamente recuperado de lo que al parecer fue producto de la ''picadura de algún animal'', y volverá a las competencias en cuanto su adiestradora la decida. Al respecto, Cornelissen anunció en sus redes sociales: ''Estoy feliz. 'Parzi' es feliz y está en forma otra vez'', y agradeció a todos aquellos que enviaron buenos deseos o expresaron su preocupación por el caballo que fue salvado por un gran gesto de su entrenadora.