Japón podría perderse la Copa América

TOKIO, JAPÓN (14/MAR/2011).- La liga japonesa de fútbol anunció hoy la suspensión de todos los partidos previstos para marzo por el terremoto del viernes, mientras se estudia retirar a la selección nacional de la disputa de la Copa América.

Un total de 41 encuentros de la primera y segunda división y de la Copa Nabisco fueron aplazados sin fecha definitiva, aunque probablemente se disputarán en julio, informó la agencia local Kyodo.

Ese mes es cuando el combinado nipón tenía previsto viajar a Argentina para disputar la Copa América, a la que este año fue invitado como campeón de la Copa de Asia, celebrada en enero en Irán.

La liga japonesa ya fue suspendida el pasado fin de semana debido al devastador seísmo, ocurrido el viernes 11.

Según el responsable de la J-League, Kazumi Ohigashi, previsiblemente más partidos tendrán que ser suspendidos en abril, lo que pondría en peligro todo el torneo doméstico de fútbol.

"El asunto es muy grave. Con todas las réplicas y sin ser capaces de garantizar la seguridad del público en todos los estadios, hemos tomado la decisión de cancelar todos los encuentros hasta marzo", dijo Ohigashi.

No se disputaron durante el último fin de semana los enfrentamientoentre los 18 equipos, entre ellos el Vegalta Sendai, de una de las ciudades más devastadas por el seísmo de 9 grados de magnitud en la escala Richter y posterior tsunami.

Su presidente, Yoichi Shirohata, indicó que el club no puede mantener su actividad porque su estadio e instalaciones están en ruinas, los jugadores extranjeros han salido del país y muchos deportistas locales han regresado a sus lugares de origen.

El pasado sábado también decidió abandonar Japón el seleccionador nacional, el italiano Alberto Zaccheroni, después de ver cómo el moderno edificio de apartamentos de 21 plantas en el que vive en Tokio se retorció "como si fuera de goma" por el temblor.

Japón también ha pospuesto el Mundial de Patinaje Artístico que se iba a celebrar del 21 al 27 de marzo en la capital.

Por el momento, el seísmo del viernes ha provocado 1.647 muertos confirmados, aunque se cree que la cifra final sea de varios miles.