Inicio soñado para el Guadalajara

CANCÚN, QUINTANA ROO (24/JUL/2011).- Todavía con el rostro endurecido, José Luis Real aplaudió tibiamente el desborde de Alberto Medina que generó la anotación marcada por Omar Arellano (55’), en un encuentro en que Chivas venció 2-0 al Atlante.

El Guadalajara obtuvo su primer triunfo en el Apertura 2011, sanó de la malaria caribeña, pero el director técnico sabe que el sufrimiento fue simple masoquismo. Bastó que sus piezas clave decidieran pisar el acelerador para dejar atrás al luchón, aunque limitado Atlante.

Sin el venezolano Giancarlo Maldonado ni el paraguayo Osvaldo Martínez, cuyas respectivas selecciones nacionales llegaron a las instancias finales de la Copa América, los Potros de Hierro carecen de punch. Quedó demostrado sobre el lienzo verde del abarrotado Estadio “Andrés Quintana Roo”.

Fiesta rojiblanca en una plaza que se le había resistido a las Chivas. La de anoche  fue su primera victoria en el hogar azulgrana, pese al irrestricto apoyo que siempre tienen en el recinto atlantista. Necesitaron seis presentaciones para conseguirla (dos igualadas y tres caídas).

Eso explicó el descomunal grito de Omar Arellano, mientras festejó el tanto que marcó la diferencia. El de Jesús Sánchez (94’) fue simple colofón a un partido que los tapatíos dominaron ampliamente durante la segunda mitad.

Criticado por su inefectividad ante la portería adversaria, Arellano cumplió la promesa que selló hace algunos días: cargó con la responsabilidad ofensiva de un equipo que genera muchas opciones de gol, pero concreta pocas.

Antes del certero cabezazo con el que venció a Moisés Muñoz había fallado una importantísima en los albores del cotejo, cuando el alumbrado del estadio funcionaba sin mayores problemas.

Gusto que duró muy poco. Dos de las torres localizadas en la tribuna que está detrás de las bancas se apagaron en varias ocasiones, pero el silbante Érim Ramírez sólo detuvo las acciones una vez, cuando verdaderamente el inmueble estuvo en penumbras, tanto como el futbol atlantista, incapaz de hacer frente al vértigo que caracteriza a todos los atacantes del Rebaño Sagrado.

El “Venado” fue incontrolable para Alfonso Luna, quien recibió la oportunidad de custodiar la zona derecha de la zaga local. Inexperto y lento, jamás controló al sinaloense. Cuando Miguel Herrera lo sustituyó con el también novel Óscar Rojas, el daño estaba hecho.

Mágicos 45 minutos de los chicos que generan ilusión en un pueblo que se ha acostumbrado a que el Guadalajara no fiche jugadores de renombre, pero que jamás dejará de exigir lo máximo al conjunto con más títulos de Liga en la historia del futbol mexicano.

Marco Fabián decidió salir del anonimato tras la reanudación. Sus compañeros lo agradecieron. Conectado, el volante es capaz de desquiciar a cualquier defensiva. Alex Diego lo sacó del juego con aquel contundente codazo en el cuello.

Artimaña que también llegó tarde. Los Potros intentaron reaccionar cuando era imposible. El “Güero” ya había reprendido a sus gacelas, método que sirvió para iniciar positivamente el torneo y fulminar el conjuro caribeño.

Alineaciones:  

Atlante: Moisés Muñoz, Alfonso Luna Islas (Óscar Rojas, 62’), Alex Diego, Diego Ordaz, Luis Venegas, Óscar Salvador Vera, Jorge Hernández, José Daniel Guerrero, Christian Bermúdez (Matías Córdoba, 64’), Juan Ezequiel Cuevas y José Francisco Fonseca (Jerónimo Amione, 77’).
D.T. Miguel Herrera.  

Guadalajara.- Luis Ernesto Michel, Miguel Angel Ponce, Patricio Araujo, Mario de Luna, Jonny Magallón, Omar Esparza, Xavier Báez, Édgar Mejía, Marco Fabián de la Mora (Antonio Gallardo, 89’), Alberto Medina (Jesús Sánchez, 86’) y Omar Arellano (Antonio Salazar, 91’). D.T. José Luis Real.