ESTADOS UNIDOS (13/NOV/2016).- La decisión más importante que tome Pete Carroll no será si correr o pasar a una yarda de ganar el título, sino ¿qué hacer para detener a Tom Brady? ¿Cómo ahuyentar los fantasmas del Super Bowl 49?El coach de los Seahawks de Seattle tiene hasta la noche de hoy para encontrar una solución a un problema que ninguna defensiva ha podido resolver, cuando visite a Brady y los Patriots de New England.La buena noticia para Carroll es que cuenta con la tercera mejor defensiva de la NFL para intentar frenar al quarterback de New England. La mala es que hasta el momento Brady parece indestructible: 12 pases de touchdown, cero intercepciones y un rating de 133.9 de un máximo de 158.3 puntos posibles desde que regresó de una suspensión que lo marginó por los cuatro primeros partidos de la temporada.La mala noticia es que New England tiene, de momento, una mejor defensiva que Seattle, segunda en puntos admitidos con 16.5 por partido o aproximadamente cuatro puntos menos de los que anota en promedio la ofensiva de los Seahawks.Los problemas de Seattle en ofensiva son evidentes, pese a la clara mejoría en su triunfo del lunes anterior. Ya no cuenta con el potente ataque terrestre, penúltimo de la NFL, que encaminó a los Seahawks hasta la puerta del título hace dos años. Con el retiro de Marshawn Lynch, también se fue el balance ofensivo que tanto ayudó a Russell Wilson.New England viene de ganar sus últimos cuatro partidos desde que Brady cumplió con su suspensión de cuatro encuentros y en todos ha anotado al menos 27 puntos y ha tenido un margen de victoria de al menos 11 puntos. En tanto los Seahawks tienen registro de un triunfo dos derrotas y un empate en sus cuatro juegos como visitantes esta campaña.Se revive un clásicoNada revive recuerdos de Super Bowl como un duelo clásico entre los Cowboys de Dallas y los Steelers de Pittsburgh, quienes se han enfrentado tres veces en el juego por el campeonato.Dallas llega como el equipo más encendido de la NFL con siete triunfos en fila, y de la mano de una dupla de novatos en el quarterback Dak Prescott y el running back Ezekiel Elliott, que han tomado a la Liga por asalto. Elliott necesita 109 yardas por tierra para unirse a Eric Dickerson y Adrian Peterson como los únicos corredores con mil yardas luego de nueve juegos.Pittsburgh tiene tres derrotas consecutivas a cuestas y carga promesas incumplidas de una ofensiva explosiva e indefendible, pero que apenas promedia 15 puntos por juego durante su racha perdedora y está lejos de encontrar la forma de sacarle provecho al talento del wide receiver Antonio Brown y el running back LeVeon Bell.Prescott es el primer pasador novato en la era del Super Bowl en iniciar y ganar siete de los primeros ocho juegos de su equipo en una temporada, pero el veterano Tony Romo ya fue activado.