En el fairway

El jueves inicia, por fin, la tercera edición del torneo Lorena Ochoa Invitational, aquí mismo en Guadalajara, en el campo de golf del Guadalajara Country Club, uno de los “campos clásicos” y “no clásicos” (para enfatizar), más hermosos del mundo.

Por favor, amable lector, no vaya a creer que estoy exagerando. Si no me cree, por favor asista al torneo, y cuando tenga la oportunidad, pregúntele a las competidoras internacionales que participarán, sobre su opinión acerca de “nuestra joya”.

Su antigüedad (68 años), los desniveles y barrancas del terreno, la gran variedad de plantas y árboles hermosos que delinean los fairways, sus lagos preciosos, sus greenes elevados y ondulados, sus fairways también ondulados y con el ancho adecuado, lo natural del arroyo de la culebra serpenteando por gran parte del campo, su hermosísimo diseño de todos los hoyos, no hay dos iguales y cada uno de ellos nos invita a admirarlo no sólo de tee a green, sino también de green a tee; la hermosura indescriptible del hoyo cuatro con su lago, la “casita” y los árboles al fondo, la cercanía de todos los hoyos con la casa club, la vecindad entre muchos de ellos que fomenta la camaradería y el poder ver “hacer sapos, palomas y tripots” a jugadores en otros hoyos cercanos, etc.

Y así podríamos continuar mencionando muchas más cualidades, que no son fáciles de encontrar en otros campos de golf. Como que el norteamericano John Bredemus, su diseñador, tuvo un momento de inspiración ÚNICO en su vida, cuando “concibió” en su mente a esta joya. Y no en balde, desde agosto de 1968, la mundialmente famosa revista Golf World, publicó en su portada una foto del campo, catalogándolo como “uno de los más bonitos campos de golf del mundo”.

Muchas veces, amable lector, sin querer, no nos damos cuenta de lo que tenemos. Debido a que lo vemos o jugamos seguido, nos acostumbramos a su presencia y se nos pasa el disfrutarlo. Este campo, diariamente puede causarnos admiración. Siempre puede haber algo (una planta, un árbol o una flor), de lo que no nos habíamos percatado anteriormente. Hasta cuando andamos “en la fruta”, nos encontramos con lugares desconocidos, pero hermosos. Cuando uno está mas consciente de disfrutar de la jugada... que de la apuesta... de seguro que saldrá mas contento y satisfecho. Aunque “le hayan bajado” el billete sus cuates, no deje que eso lo incomode, total la lana va y viene, pero el disfrutar de cada jugada de su vida, no.

Como que a veces creemos que no es posible que tal joya exista en nuestra ciudad. Pero aquí la tenemos desde 1942, para nuestro deleite diario.

Aparte, si nos pusiéramos a mencionar la cantidad de torneos nacionales e internacionales, de golfistas amateurs y de profesionales que han tenido lugar en este campo, llegaríamos a la conclusión de que, durante toda la vida del club, sus socios y directivos se han preocupado por fomentar, muy significativamente, el golf en nuestro país y darle una imagen nacional e internacional al club, tal y como lo visualizó y luchó por lograrlo su fundador, Don Raúl Urrea Avilés.

Esta tradición continúa vigente hasta nuestros días y qué más prueba de ello que este torneo de Lorena, en el que competirán cinco de las seis mejores golfistas del mundo, cinco invitadas y las 26 mejores de la LPGA que puedan asistir, siendo que la peor clasificada para jugar este torneo, es la “nada despreciable” número 38 de la LPGA, de nombre Candie Kung, de Taiwán.

En las primeras dos ediciones de este torneo, Lorena quedó empatada en el lugar 14 y empatada en el sexto lugar, con scores de cuatro y siete bajo par, respectivamente. Mucha suerte para éste.

Hasta la próxima ocasión, procure mantener su bola En El Fairway.