En el fairway

Un “chavo” australiano de sólo 22 años de edad, Jason Day, ganó el domingo pasado el torneo HP Byron Nelson Championship. Pero no hay que pensar, por ningún motivo, que fue una “chiripada”. A esa corta edad, Jason ya había jugado 65 torneos en la gira de la PGA y 19 en la Nationwide Tour.

En 2006 se hizo profesional y en 2007 jugó en la Nationwide Tour, en donde, a sus 19 años, se convirtió en el jugador más joven en ganar un torneo de dicha gira. Para 2008, ya con tarjeta de la PGA Tour, ganó 767 mil dólares y en 2009 ganó mas de un millón y cuarto. Actualmente, en este 2010, ya lleva 1.3 millones de dólares y es el número 23 de la Copa FedEx.

A lo mejor, parte de su triunfo, se lo debe a otro “chavo”, a el amateur norteamericano Jordan Spieth, de 16 años, quien el domingo llevaba gran parte de la galería, cosa que le quitó presión a Jason.

“Yo iba caminando al hoyo 4 y parecía que había como mil personas siguiéndolo”, comentó Jason. “Eso le quitó a mis hombros algo de presión, ya que supe que la gran mayoría de la gente que me seguía eran amigos cercanos y familia”.

Durante todo el torneo, el “chavo” Jordan Spieth, estuvo “en contención”. Todavía faltando nueve hoyos para que finalizara su última ronda, únicamente estaba a tres golpes de distancia del líder. Pero desafortunadamente “se cayó”. Fue víctima de un “horrendo zopilote” en el hoyo 15, lo que le quitó la oportunidad de “hacer historia”.  Al final tiró 72, dos arriba de par, lo que lo hizo terminar con un score total de 4 bajo par, buenos para un empate en el lugar 16.

Aparte de la excelente experiencia golfística que obtuvo Jordan, también logró adjudicarse el título de ser el sexto jugador más joven en la historia de la PGA Tour, en pasar el corte en uno de sus torneos.

Qué bueno que están apareciendo los golfistas jóvenes y talentosos. En esta temporada parece ser que “están ganando terreno”, ya que de los 22 torneos que se han jugado, NUEVE los han ganado jugadores que se encuentran entre los 20 y 29 años de edad. Increíble, ¿verdad?

Qué bueno que esto sucede en tiempos en que, tanto la gira de la PGA como la de la LPGA, necesitan de ídolos jóvenes que les vuelvan a inyectar la emoción y fanatismo que Tiger y Lorena . . . nos proporcionaron en sus respectivos tiempos.

Hasta la próxima ocasión, procure mantener su bola En El Fairway.