En El Fairway

Tanta expectación ha causado el “regreso” de Tiger Woods al golf competitivo, que en varios medios informativos se ha estado especulando sobre cuál será el torneo “afortunado” que logre “reiniciarlo” en su, por demás exitosa, carrera profesional.

Entre los medios informativos que han estado especulando al respecto, se encuentran el New York Post, el cual dice que eso sucederá en el torneo Arnold Palmer Invitational, que inicia el próximo jueves 25 de marzo, debido a que es el único torneo que Tiger no ha dejado de jugar desde que se hizo golfista profesional, a que es el campeón defensor, a que lo ha ganado seis veces, y además, por si fuera poco, a que el campo de golf le queda a unas cuantas cuadras de su casa. La agencia noticiosa Associated Press dice que “dos personas con conocimiento de los planes de Tiger”, les dijeron que se mantendrá fuera del golf de competencia, cuando menos hasta el Masters; y la cadena televisiva Fox Sports dice algo similar, al asegurar que Woods regresará hasta el día ocho de abril, fecha en que inicia dicho torneo de maestros.

A pesar de las “fuentes confiables” que puedan tener dichos medios de comunicación, la verdad es que sólo podemos creer lo que Tiger Woods exprese en alguna entrevista, conferencia de prensa o  a través de su página en la red de redes.

Muchas de las especulaciones actuales provienen del hecho real de que Tiger regresó de su “terapia familiar” en Arizona, el pasado domingo 28 de febrero, con el objeto de iniciar su acondicionamiento físico, y hace alrededor de una semana, que empezó a practicar golf de nuevo, con su entrenador de swing Hank Haney.

Positivamente hablando, ojalá que su regreso sea en el torneo de Bay Hill, y si no, que sea en el Masters, o hasta en el The Players Championship a principios de mayo. Dependiendo de cómo vaya evolucionando su práctica y la confianza en su juego, Tiger decidirá la fecha exacta de su reinicio.

Eso sí, su regreso tiene que ser contundente. No se puede dar el lujo de “reventarse un 80” durante alguna de las rondas del torneo de su nuevo debut. Aunque creamos que a Tiger no le podría suceder algo similar, no olvidemos que en el golf no hay nada escrito, y más aún, cuando hay demasiadas “culebras ponzoñosas” en su cabeza, o entre la galería de los torneos. O, tal vez, al revés. Que regrese con tantas ganas de seguir rompiendo récords, que se “reviente” un score por abajo de los 61 golpes, su récord personal en una ronda de torneo de la PGA tour. En fin, creo que todo mundo estaremos pendientes de poder verlo cuando regrese, a ver qué pasa.

Hasta la próxima ocasión, procure mantener su bola En El Fairway.