Empate que deja dudas en el Tri

ATLANTA, GEORGIA (05/MAR/2014).- La Selección mexicana de futbol tuvo un partido cerrado en Atlanta y luego de mucho batallar terminó empatado a cero goles pero dejado un mar de dudas en torno a los jugadores que podrán ser llamados por el técnico Miguel Herrera de cara a la Copa del Mundo de Brasil 2014.

El equipo mexicano resistió un feroz ataque nigeriano y cerró con un marcado dominio y mayores oportunidades en el único experimento del técnico Miguel Herrera con sus europeos para acercarse al futbol africano, al que pertenece Camerún, su primer rival en Brasil 2014.

Fueron 20 minutos, los primeros del partido, los que México tuvo que soportar las llegadas de Nigeria, que no concretó por las buenas acciones del portero Guillermo Ochoa, y a partir de ese momento fue a más para equilibrar las acciones.

El remate de cabeza de Rafael Márquez al minuto 21, en un tiro de esquina, que Enyeama logró salvar, marcó el momento a partir del que México frenó a los nigerianos, que también se preparan para el Mundial.

Aún con los errores iniciales, México dejo ver buenas cualidades defensivas frente a rivales más fuertes en el aspecto físico y logró neutralizar, aunque no sin esfuerzos, la velocidad de los nigerianos.

En el ataque, el cuadro de Herrera desplegó su capacidad ofensiva por los carriles, tuvo disparo de larga distancia, mostró avances en la estrategia y fue competitivo en el juego aéreo, tanto en defensa como en ataque.

El Tri presentó además una nueva camiseta color rojo intenso y de paso demostró su arrastre entre la comunidad de este país en la zona de Atlanta, con una entrada al Georgia Dome de casi 69 mil aficionados.

México tuvo un comienzo muy complicado con errores y poco control del balón, lo que lo empujó atrás para soportar una fuerte presión de Nigeria de la que salió sin daño gracias a un par de atajadas del guardameta Guillermo Ochoa.

Poco a poco, y con su técnico Miguel Herrera dirigiendo a gritos, México logró bajarle la velocidad a Nigeria y acabó por ser el mejor en el campo de Georgia Dome, con varias ocasiones de gol que no cuajaron ante la mala puntería de Oribe Peralta.

La creatividad de México esta a cargo de Paul Aguilar por derecha y Andrés Guardado por la izquierda y en el ataque esperaban Oribe Peralta y Javier 'Chicharito' Hernández, que brilló poco en la primera parte.

Para el último tercio del primer tiempo, México ya había logrado contener la amenaza nigeriana y por momentos dominó a su rival, que tuvo llegadas más espaciadas y con menos rivales, ante el empuje del 'Tri'.

Herrera aprovechó bien todo el partido y le abrió oportunidad a los legionarios Ochoa, Moreno, Reyes, Guardado, Herrera y Hernández, pero también a los mexicanos que pasan un buen momento, el mismo Pulido y a Raúl Jiménez.

Para el complemento, Herrera sacrificó al delantero Javier Hernández, que se notó muy poco en los primeros 45 minutos y le dio la oportunidad a Alan Pulido, autor de un triplete en el encuentro anterior contra Corea.

México competirá en el grupo A del Mundial al lado de las selecciones de Brasil, Camerún y Croacia; y Nigeria participará en el grupo F del Mundial junto a Argentina, Bosnia y Herzegovina e Irán.

Ficha técnica:

México: Guillermo Ochoa; Héctor Moreno, Rafael Márquez, Diego Reyes (Francisco Hernández, m.65), Paul Aguilar; Andrés Guardado, Juan Carlos Medina (Carlos Peña, m.64), Héctor Herrera (José Juan Vázquez, m.84), Luis Montes (Javier Aquino, m.46); Oribe Peralta (Raúl Jiménez, m.70) y Javier Hernández (Alan Pulido, m.46). Entrenador Miguel Herrera.

Nigeria: Vincent Enyeama (Austin Ejide, m.46) ; Elderson Echiejile, Efe Ambrose (Ramon Azeez, m.46), Godfrey Oboabona, Kenneth Omerou; Jhon Mikel Obi, Ogenyi Onazi, Ahmed Musa (Leon Balogun, m.46), Victor Moses (Imoho Ezekiel, m.71); Emmanuele Emenike y Michel Uchebo. Entrenador Stephen Keshi.

Arbitro: El costarricense Walter Quezada amonestó a los nigerianos Mikel (m.77) y Emenike (m.80).

Incidencias: Partido de preparación para el Mundial de Brasil para ambas selecciones, el segundo de siete para México, en un Georgia Dome con casi 69 mil aficionados y con un gran ambiente favorable para México.