El valor de la sinceridad

Esta semana, me pude dar el gusto de dialogar sin el apremio del reloj con José Luis Sánchez Sola, director técnico de Estudiantes Tecos; el motivo de mi deseo de conversar con el popular “Chelís” es que desde su irrupción en la Primera División se convirtió en todo un personaje del futbol mexicano. El poblano por su manera de ser se echó a la afición al bolsillo; hombre carismático, elegante y estrafalario, en nuestro diálogo me reveló su grata sorpresa por la forma como los tapatíos lo han recibido de una manera muy calida, siendo la primera ocasión que por su trabajo como entrenador tiene que emigrar de su ciudad natal; le respondí que no debería de estar sorprendido puesto que es una persona que le cae bien a la gente y que ha causado simpatía por su manera de conducirse.

José Luis, es sin duda un caso atípico totalmente en el estereotipado futbol nuestro, la manera sincera, frontal, directa y sin tapujos de expresar ideas y sentimientos en un lenguaje coloquial y entendible para todos contrasta con los misterios, secretos frases de casette y declaraciones maquilladas de falsedad que escuchamos a diario por muchos charlatanes que venden una realidad torcida; “Chelís” acepta que él no ha sido parte del medio y seguramente eso lo hace ser más genuino, el escucharlo criticar a su directiva porque no les cumple a sus jugadores, el cobijarse con su grupo en medio de una tempestad institucional, lograr convencer a sus jugadores de tal manera que a pesar de los problemas rindieran en la cancha y dieran resultados no es poca cosa, en Puebla lo hizo.

Estos procederes sumados a factores primordiales como una buena preparación física, exigencia futbolística, lograron que algunos olvidados volvieran de su pasado, Davino, Osorno, Borguetti, “Bola” González, Joaquín Velázquez, Nicolás Olivera, y otros que del anonimato salieron al aparador, Jorge Zamogilny, Luis Miguel Noriega, “Cherokee” Pérez, “Samba” Rosas, Hérculez Gómez, son el trabajo de conjunto comandado por Sánchez Sola que hizo mas con menos.

Se podrá estar de acuerdo o no, podrá gustar o no la forma de jugar de sus equipos, podrá caer bien o no su personalidad, pero es inobjetable el valor de la sinceridad el mostrar que se puede llamar a las cosas por su nombre sin que ocurran cataclismos, decir las cosas como son, ejemplo el aceptar un vínculo con un promotor de una forma natural pese a los escándalos que se puedan suscitar, seria deseable que en el futbol mexicano hubieran más personajes como éste que además de hablar claramente está dispuesto a debatir ideas algo que urge en nuestro balonpie. Quedará en la memoria que Puebla y “Chelís” quedaron hechos el uno para el otro, bueno será el reto con Estudiantes, a ver si “Chelís” es de verdad, que yo creo que lo es, y que ponga a cantar en la institución a todos con la misma canción, será interesante.

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