El partido que nadie quería jugar

OSAKA, JAPÓN (15/DIC/2015).- Tras hacer el ridículo ante el Guangzhou de China, el América quiere al menos ocupar el quinto sitio del Mundial de Clubes 2015 cuando mida fuerzas con el Mazembe de la República Democrática del Congo.

La cancha del estadio Osaka Nagai será el escenario donde estos equipos midan fuerza cuando las manecillas del reloj dicten las 16:30 hora local (01:30 del Centro de México).

Los sueños por trascender en esta competencia por parte del campeón de la Concacaf quedaron en el olvidó en los 10 minutos finales de un duelo en el que habían sido mejores en términos generales, pero que como ha sido una costumbre en este semestre, la falta de inteligencia de algunos de sus jugadores desconcentró a todo el equipo.

Además de la falta de autoridad desde la banca que dirige Ignacio Ambriz, quien superado por la jerarquía del plantel nunca supo imponer disciplina, aunado a su mal manejo al momento de los cambios.

Habrá que ver qué sucede luego de este duelo, más allá del resultado que se pueda dar, ya que tras la agresión al argentino Rubens Sambueza en pleno partido, es muy probable que el colombiano Carlos Quintero abandone el “nido” de Coapa.

Y aunque al director deportivo Ricardo Peláez respalde por completo a Ambriz, la realidad es que el estratega ha fracasado por completo en su andar con las Águilas y sus oportunidades podrían haber terminado.

Enfrente estará el “Todopoderoso” Mazembe, uno de los conjuntos más importantes de la República Democrática del Congo, que tampoco quieren quedarse como uno de los peores conjunto de la competencia, luego que fueron eliminados en cuartos de final por el Sanfrecce Hiroshima de Japón.

Errores en los cambios

Es difícil explicar cómo el América dejó escapar el domingo su partido ante el Guangzhou.  “Fue un rotundo fracaso y yo soy el principal responsable”, dijo Ambriz, que ya reconoció su equivocación con los cambios en la eliminación ante los Pumas en el Apertura 2015. Tras las sustituciones, progresivamente el América dejó de controlar el  choque y empezó a conceder espacio a un Guangzhou que parecía que no tenía más gasolina, tras varias semanas sin competir.

River debuta contra Hiroshima, pensando en el Barcelona

La derrota de América contra el Guangzhou chino en la Copa Mundial de Clubes fue un recordatorio oportuno para River Plate de que ya no hay rivales pequeños en el futbol.

El equipo argentino, que ganó en un mismo ciclo el campeonato nacional, la Copa Libertadores y la Copa Sudamericana, es amplio favorito para doblegar el miércoles en su debut al monarca japonés Sanfrecce Hiroshima y avanzar a una eventual Final contra el Barcelona.

“Tenemos la obligación de ganar el miércoles para jugar la final tan soñada, que tanta ilusión nos genera. Pero no hay que subestimar al equipo japonés”, advirtió el presidente de River Rodolfo D’Onofrio.

“Desde que ganamos la Libertadores, la gente me dice que no importa si volvemos a ganar la Sudamericana o el torneo nacional: Lo que quieren es el mundial de clubes”, expresó el jugador riverplatense Leonel Vangioni a su llegada a Japón.

Hiroshima, un club apoyado financieramente por la firma automotriz Mazda y que se consagró campeón de Japón tres de los últimos cuatro años, llegó a las Semifinales tras doblegar 2-0 al Auckland City neozelandés y 3-0 al Mazembe de Congo. Es dirigido desde el 2012 por Hajime Moriyasu y tiene como figuras más conocidas al volante croata Mihael Mikic y al brasileño Douglas, máximo goleador del equipo.