Jueves, 28 de Noviembre 2024
Deportes | Por: Ricardo Zermeño Barba

Desde el lienzo

Cuando la Charrería nos hace vibrar

Por: EL INFORMADOR

Hola amadores del caballo, escaramuzas  y la charrería, un gusto estar nuevamente con todos ustedes y aprovecho para presumir que la charrería sigue siendo tan hermosa y en algunas partes del país, casi como una religión.

Lo anterior viene a colación, porque en los últimos tres días se ha jugado la eliminatoria del Torneo Guadalupano en Ixtlahuacán del Río, Jalisco, mismo que hoy tiene doble final con  los seis mejores de lo 18 que entraron, así los sentimos.

Antes de seguir, hago una leve pausa para felicitar a mi sobrino “Betito” Hernández Zermeño quien acaba de cumplir su primer año de vida y el que anda emocionado en su abuelito Nacho Zermeño Barba, porque su nieto ya empieza a caminar.

Regresando con el Torneo Guadalupano, serán las fechas en que uno por la llegada de Navidad y que se avecina el año nuevo, se vuelve uno muy sensible o las reflexiones nos tienen emocionados.

Apenas en la entrega anterior comentábamos del éxito del IV Torneo Nacional Infantil-Juvenil que se realizó en el Rancho San Gabriel de Zapopan y que nos vibrar, pero sobre todo nos recordó de qué estamos hechos, porque emociones como esas, no siempre se viven.

De aquí quedó comentar la charreada de gala que ganó el 8 Columnas a www.expresocharro.com y Charrería Lo Nuestro, que fue un éxito y muy al margen del resultado, lo más hermoso fue el convivio en pleno entre la gran familia charra, los medios de comunicación que si hacen periodismo y el público en general.

TIEMPO DE REFLEXIONES

Y lo que son las cosas, apenas presumíamos en la entrega anterior la esencia de la charrería y nos toca seguir vibrando con emociones como esa y que dicho sea de paso, no tienen precio pero si mucho valor estimativo.

Nos fuimos un grupo de entusiastas charros a Ixtlahuacán del Río, a escasos 50 kilómetros de Guadalajara y al margen de la zona de curvas de casi todo el recorrido, el camino se hizo muy corto con tanta ocurrencia de José Eduardo Moreno y Ramiro Mora, que nos traían divertidos a Andrés mi sobrino, a CASAMA y Hugo Gómez, así como a mi y mi hijo Ricardo.

Metimos 299 ó 301 ya ni me acuerdo, pero íbamos en sexto lugar, faltando de ver acción algunos gallones, pero eso no es lo importante. Lo mejor es el convivio en pleno con la hermandad charra, porque eso es lo que nos hace vibrar y acordarnos que nuestro Deporte Nacional, sigue siendo parte de la esencia de nuestras vidas.

Esa hermandad se manifiesta de muchas maneras, conviviendo con los charros en que enfrentamos deportivamente, llegar al lienzo y ver el ganado, llegar a los tacos y tomar una rica agua fresca.

No sé si es la época navideña, pero si se enchina la piel cuando uno vive cosas como esta, mismas que quería compartir con ustedes en esta columna semanal.

Comentarios al columnista: zermenobarba@yahoo.com.mx

Temas

Lee También

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones