Desde el lienzo

Hola estimados amadores del más mexicano de los deportes, hoy nos vamos sin refrán, aunque sí aclaramos que honor a quien honor merece y aprovechamos la ocasión para comentar lo sucedido en el primer Torneo Internacional Charro Por  la Salud.

El mismo se llevó a cabo con bastante éxito de jueves a ayer, en el lienzo Ignacio Zermeño Padilla, donde 15 equipos de varios puntos del país se dieron cita para apoyar de manera desinteresada a la Fundación Hospitales Civiles de esta ciudad noble y leal Perla Tapatía, dentro de la celebración del XI Congreso Internacional Avances en Medicina y VII Expomédica Guadalajara 2009.

Y lo decíamos al principio o mejor dicho, en el encabezado de esta columna que hay veces que la charrería no tiene límites y sobre todo en cuanto a emociones.

Los homenajes mejores son en vida y ese fue para don Miguel Lara y su hijo Pepe Toño, quien hace años se accidentó y quedó confinado a una silla de ruedas, pero que es todo un ejemplo de superación, porque aunque con parálisis pero da clases a charros, promueve la equinoterapia y de verdad, que es una bendición de Dios.

El tradicional corte de soga lo realizó Pedro Villaseñor Espinoza, presidente de Promoción Económica del Ayuntamiento, escoltado por dos integrantes de la Escaramuza Alteñitas de Guadalajara quienes después del coleadero realizaron una excelsa exhibición de su destreza demostrando el por qué han sido tres ocasiones campeonas nacionales.

El mismo jueves, se hizo entrega de reconocimientos a los invitados especiales por su labor altruista y apoyo a los Hospitales Civiles de Guadalajara a la Escuela American School Foundation of Guadalajara recibiéndolo Janet Heinze y al Instituto Silva recibiendo Juan Manuel Salas Gallardo.

Hubo reconocimientos los equipos de Cuauhtémoc, Nuevo León, Hacienda Vaquerías y Carlos Sánchez Llaguno, contendientes de la primera competencia.

Como es una costumbre, Bancomer siempre presente y apoyando a los mejores eventos y éste, que es totalmente altruista, no podía pasar desapercibido para sus directivos.

Se enchina la piel

Sin duda alguna, además de las competencias, lo más emotivo fue el momento donde se le otorgó un merecido reconocimiento, en vida a José Antonio Lara Romero, mejor conocido en el ambiente como “Pepe Toño” charro del estado de Hidalgo que sufriera un accidente que lo mantiene en una silla de ruedas, pero eso no ha impedido que salga adelante, ya que desde su trinchera continúa haciendo charrería como instructor además de tener una clínica de equinoterapia en San Juan del Río, Querétaro.

El Comité Organizador  le entregó un bello reconocimiento cincelado por el maestro Enrique Roberto Flores Pérez; en correspondencia, “Pepe Toño” entregó una foto a este servidor, donde su señor padre, don Miguel Lara Guerrero está acompañado con Pedro Infante.

Totalmente emocionados, sus padres, además de don Miguel, también fue testigo doña María Elena Romero Piedrabuena, además de otros familiares y amigos que compartieron con “Pepe Toño” este merecido homenaje.

La idea de homenajear a padre e hijo, así como a su señora madre, se ocurrió el día de la rueda de prensa 10 días antes del evento, luego de una amena charla con Jorge Rivera, los periodistas Javier Rodríguez Acevedo y CASAMA, así como un servidor.

Este primer Torneo Charro Por la Salud finalizó con una exhibición de charrería para los congresistas y posteriormente Vicente Fernández Abarca se presentó en la arena del Ignacio Zermeño Padilla quien deleitó con sus canciones a la afición que se dio cita al inmueble.