MADRID, ESPAÑA (10/SEP/2017).- Alberto Contador se ha retirado del ciclismo profesional en la Plaza de Cibeles de Madrid aclamado por la multitud pero sin derramar lágrimas, como hizo ayer tras su épico triunfo en L'Angrilu."Hoy no, pero ayer sí. Y mucha gente lo vio. El día de ayer fue lo máximo. Un puerto mítico, un tiempo malo, un día de los que se recuerdan ...", ha dicho cuando le han preguntado si ha llorado, y ha descartado una vez más echarse atrás en su decisión de retirarse."Físicamente estoy bien, pero quiero dar paso a otros corredores jóvenes y aportar al ciclismo desde fuera. Me voy a dedicar a la Fundación Contador trabajando con ciclismo de base, pero ya con la idea de sacar el año que viene un equipo continental. Además, en 2004 sufrí un ictus y ahora tendré tiempo para aportar mi granito de arena para combatir esta enfermedad y a sus afectados", ha explicado."Voy a coger la bicicleta, porque ya me están vacilando los compañeros con que me voy a poner fondón y quiero mantenerme en forma", ha añadido.Sobre su carrera, ha dicho que su "mejor momento ha sido cada día en la bicicleta, sin olvidar los triunfos en las grandes carreras" y que del peor prefería no acordarse, sino quedarse "con lo positivo", porque siempre ha sido "una persona muy optimista"."Y me gustaría que la gente se quedase con que siempre he dado el máximo de manera honesta y profesional. La gente se quedará con eso", ha finalizado."¿Qué he hecho para recibir este momento tan bueno?", se ha preguntado cuando, en el podio junto a sus compañeros del equipo Trek, que lo han acompañado a recoger el Premio al Corredor más Combativo, ha recibido una ovación atronadora y ha escuchado cómo todo el público gritaba su apellido al unísono.