Alerta

Recientemente cambió la presidencia de Clubes Unidos de Jalisco, entidad formada por los conjuntos del Atlas, Chivas, Universidad de Guadalajara y Jalisco conforme a sus estatutos la presidencia se rota cada dos años. El Lic. Arturo Ramos Alatorre, directivo del Atlas, concluyó su periodo y entregó la estafeta al Club Guadalajara en la persona de Arturo Gálvez.

La mudanza de Chivas, hecho que no pocos pensaron que nunca se daría, evidenció que no se calcularon los efectos que tendría sobre el Estadio Jalisco en temas de administración, operación, más las afectaciones a terceros y que no se planeo para evitarlos.

En algo rotundamente inadmisible, pareciera que el inmueble dos veces mundialista, comenzó a sufrir un profundo e injusto desprecio, la Federación Mexicana de Futbol lo marginó de ser sede del mundial Sub 17 y hasta el momento excluido también para ser sede de los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011.

El coloso de la Calzada Independencia es de los mejores, con un magnifico mantenimiento coordinado por el buen trabajo, que desde más de 20 años realiza como administrador Pedro Herrada Morelos y su colaboradores.

El Estadio Jalisco está en muchas mejores condiciones de mantenimiento, funcionalidad y servicios que estadios como el: Universitario de Nuevo León, Tecnológico de Monterrey, “Nemesio Diez”, Azul, Cuauhtémoc, “Andrés Quintana Roo” por citar unos cuantos.

Sin embargo, la salida del Rebaño provocó un severo desajuste en el aspecto económico, ya no hay los ingresos suficientes para el mantenimiento y operación del estadio. Sería lógico pensar, aunque sin veracidad, que al ser el Guadalajara, el club que preside Clubes Unidos,  poco le interesaría el continuar con los proyectos de mejoras para el inmueble, dado que Chivas tiene nueva casa.

El Lic. Arturo Ramos, me comentó tras su experiencia que considera que es el momento de tomar decisiones para evitarse problemas mayores, algo con lo que estoy de acuerdo, modificar el esquema actual, buscar socios comerciales, realizar eventos enfocándose a la obtención de recursos que no sólo mantengan sino que permitan su modernización.

Sería una pena que el recinto en cuyas tribunas las familias tapatías por generaciones han gozado y sufrido por su equipo comenzara a deteriorase ante nuestros ojos sin que hagamos nada por evitarlo, ¡el Estadio Jalisco tiene magia! la de la tradición de los recuerdos, el observar un partido en sus tribunas con su añeja historia hace que el futbol se sienta más profundamente, en él muchos aprendimos a gozar y disfrutar del futbol como nos gusta con sus sabores aromas y personajes, sigue siendo por mucho el máximo escenario del  futbol en Jalisco y no se puede permitir que por falta de acciones se vaya deteriorando, volviendo obsoleto, cayendo en  desuso o peor aún en ruinas como quisieran algunos.

El problema es serio y hay que actuar en consecuencia para evitar que eso ocurra, nuestro Estadio Jalisco es patrimonio de todos.

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