Adiós Guadalajara 2011

GUADALAJARA, JALISCO (21/NOV/2011).- El fuego de la Fiesta de América se ha extinguido. Con la satisfacción de que los Juegos de la Inclusión lograron su objetivo, que fue demostrar que todos somos iguales, Guadalajara se despidió con una celebración donde la gran invitada fue Canadá, quien ahora se preparará para recibir los Juegos Parapanamericanos dentro de cuatro años.

Los deportistas, como una sola nación representando a América, salieron a despedirse del público que, tal como lo hiciera en las competencias, llenó los aproximadamente siete mil asientos del Estadio Telmex de Atletismo, cerrando con broche de oro las alegrías y emociones que durante ocho días se vivieron en las competencias.

La canción Huapango, con la alegría del mariachi, acompañó con sus tonos el desfile de banderas que daban un hasta luego a los Juegos, comenzando con la de Argentina, en el orden que se hizo en la apertura. Enseguida los atletas, todos juntos, aparecieron y con ellos el colorido que emocionó a los asistentes.

Máscaras, pinturas, pancartas y demás se pudieron observar, como lo hiciera un canadiense, quien ocultó su identidad con una máscara del luchador mexicano Silver King, estirando en sus manos su bandera, teniendo sobre la Hoja de Maple la palabra “Gracias”.

Los aplaudidores inflables no podían faltar, haciendo del remix de canciones que se escuchaba en el sonido local, más estruendoso, más rítmico, pues los atletas y voluntarios también se unieron para bailar, brincar y tomarse fotos; dando a entender que, aunque no se conocían, se deseaban suerte y se agradecían por los días de convivencia, pues fueron una familia.

El momento más emotivo fue cuando se premió el uno-dos-tres de México en el maratón en silla de ruedas. El marco se volvió todavía más emotivo cuando el Presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa, premió a Aarón Gordián, Saúl Mendoza y Alfonso Zaragoza con la medalla de oro, plata y bronce, respectivamente, por haber quedado en las tres primeras posiciones dentro de la prueba con la que el atletismo se despidió de Guadalajara. El Himno se entonó con toda fuerza, buscando la fuerza para que se mantenga hasta dentro de cuatro años en Toronto.

Fue entonces que Canadá tomó oficialmente la sede de los Juegos Parapamericanos, con una bella demostración artística y resaltando la conexión natural que existe entre México y ellos: la mariposa monarca.

Con esto se dieron paso a los discursos, donde la presidenta del Comité Organizador, Imelda Guzmán de León, calificaba a la justa como “los Juegos de la alegría de vivir”, pues los atletas nos pusieron un verdadero ejemplo de vida.

El mandatario de Poder Ejecutivo, Felipe Calderón, fue el encargado de dar por terminados los Juegos Parapanamericanos y el Coro de los Infantes Amadeus del Instituto Cultural Cabañas, con el “Cielito lindo”, canción popular mexicana que más se escuchó en todos los Juegos, despedían a la antorcha que en ese momento se extinguió, dando paso a un fuerte aplauso.

Una fiesta del futuro dio paso al final de la clausura con la presentación artística de Sergio Bustamante. La fiesta musical estuvo a cargo del grupo mexicano de rock Moderatto, que encendió los ánimos de los atletas con sus mejores éxitos durante casi una hora.  De inmediato los deportistas abandonaron sus sillas para acercarse lo más posible al escenario y bailar las canciones de moda, al finalizar su presentación un mariachi con las canciones tradicionales de México fueron el epílogo de la fiesta y con ellos un enorme adiós a Guadalajara 2011.