Villoro reflexiona sobre la violencia en Festival VivAmérica

MADRID, ESPAÑA.-Si se cumple la premisa de que el arte surge del vientre de una sociedad descompuesta, los mexicanos "estaríamos condenados a ser renacentistas", dijo el escritor Juan Villoro, al reflexionar sobre "el baño de sangre" que propaga cada día el crimen organizado en su país.

"La sociedad está muy rota y descompuesta, pero tiene muchas riquezas como comunidad", precisó el escritor mexicano en una entrevista en Madrid, donde mañana participará en el Festival VivAmérica.

Pese a la ofensiva del Gobierno de Felipe Calderón contra el narcotráfico, Juan Villoro (Ciudad de México, 1956) se mostró pesimista ante una situación que, afirmó, "no parece tener salida".

Recordó que la estrategia del presidente Calderón surgió como "una respuesta a una situación de crisis de gobernabilidad. El problema es que debemos juzgar toda guerra por resultados concretos y a la fecha ha habido más de 13.00 muertos por el crimen organizado".

Una coyuntura que, sin embargo, no le hace perder la esperanza en cuanto al mundo de la creación, donde el escritor y periodista observa "un caldo de cultivo muy fecundo".

Al tener muchos problemas sociales, "la política cultural de México ha caído mucho, pero no así -dijo Villoro- la creación individual, desde el rock, hasta el cine, pasando por las pequeñas editoriales independientes que están surgiendo".

Galardonado con el Premio Xavier Villaurrutia (1999), el Premio Internacional de Periodismo Vázquez Montalbán 2006 y el Premio de Narrativa Antonin Artaud en México 2007, el autor de "El testigo" defiende el rol crítico del escritor.

En su opinión, los escritores afrontan dos desafíos, por un lado, "es inevitable que seamos un espejo crítico de lo que está ocurriendo en la sociedad".

Y, por otro, consideró "imprescindible" mantener el compromiso con el placer. "La literatura -argumentó- es una forma de la felicidad y en los momentos más adversos debe haber zonas celebratorias a través del arte".

Narrador, cronista y ensayista, confiesa no encontrarse cómodo en ningún género, "todos son incómodos", dice, para añadir que el "estímulo surge de la dificultad".

Consideró que el alza o la baja del interés internacional por un grupo de escritores "no siempre tiene que ver con calidad intrínseca de lo que se está produciendo y sí con el interés que despierta un continente en un momento determinado", como ocurrió con América Latina en los años sesenta y hoy con China, India o Europa de Este, donde "están puestos los ojos".

Villoro disertará mañana en la Casa de América de Madrid sobre la relación entre la interpretación literaria y la pasión futbolística.

Bajo el epígrafe "Dios es redondo", que coincide con el título de uno de sus libros, Villoro examinará la relación entre fútbol y literatura.

Sostiene que para conocer una época hay que conocer sus pasiones y "el fútbol es la forma de pasión mejor repartida y organizada en el planeta tierra".

El impulso que hace que una persona se pinte la cara para olvidarse de sí mismo y comportarse de una manera totalmente distinta en un estadio, es sin embargo lo que realmente le interesa, reveló.

Sin olvidar, que como pasión organizada, el fútbol "se presta a todo tipo de abusos e intereses y ahí entran en juego los nacionalismos, la manipulación política, la especulación económica o el dopaje", apuntó.

Villoro comparte cartel en el festival VivAmérica con su compatriota el cineasta Guillermo Arriaga, o los escritores colombianos Juan Manuel Roca y Laura Restrepo.

El periodista nicaragüense Carlos Fernando Chamorro y la política Rebeca Grynspan participarán también en los coloquios programados desde ayer en la tercera edición de VivAmérica, que concluirá el domingo próximo con una cabalgata por la calles de Madrid abanderada por el cantante argentino Fito Páez.