La reunión con la atenta audiencia también tenía que ver con la presentación de sus obras: "Celebrando periodismo de emergencia" editado por Conaculta; la novela, "La vida que se va", reeditada por Alfaguara y dos volúmenes: "Gente así" y "Más gente así".Antes de dar inicio con su charla, él y Jesús Ochoa intercalaron textos "a la limón" como el mismo dijo, para explicar connotaciones del cuento corto basado en la realidad, que a veces resulta más sorprendente que la ficción, porque ésta, según Leñero, es más fuerte que la imaginación. Así, "Aniceta" y "Valentín" fueron conocidos y reconocidos por los asistentes, una pareja de clase humilde sumergida en la violencia y cómo cada uno tiene un final escalofriante. Este relato pertenece al libro "Gente así"."Quiero empezar agradeciendo la presencia de Pablo, un hombre de letras al que todos hemos seguido en su programa, "La dichosa palabra" y por supuesto, también a Jesús Ochoa con quien me unen muchas situaciones. Primero, que los dos somos gente del ambiente de teatro, del cinematográfico, aficionados al beisbol, somos jugadores de dominó y compartimos a una misma mujer que es Eugenia Leñero, la esposa de Jesús y la tercera de mis hijos. Ahora también padecemos de una misma situación, traemos una costilla fracturada".Sobre esta característica de sus relatos, Boullosa destaca la suspensión de la incredulidad donde los escritores pueden usar herramientas estilísticas para darle verosimilitud a sus cuentos. "Eres un maestro de eso, (le dice a Vicente Leñero), mezclas la realidad con la ficción, que terminamos por creernos todo los que nos dices, tus crónicas son fabulosas".Destaca además que uno de los elementos consistentes en sus textos es el tema del narcisismo por lo que lo cuestionó sobre cómo se maneja esa admiración hacia uno mismo."El escritor no tiene más punto de vista que uno mismo", le respondió Leñero. "Yo manejo mucho el 'yo', pero la intención es confesar a través de uno cómo se ve la realidad. Uno utiliza la tercera persona o primera persona no para ensalzarse, sino para contar la realidad, incluso a veces contra uno mismo. Cuando alguien escribe su autobiografía crea un narrador que cuenta la historia".Vicente reconoce que lo mejor de él es la imaginación, que las historias originales no se le ocurren hasta que el periodismo y su trabajo como reportero o cronista dejan que en él surja la creatividad de transformar esos hechos reales en ficción."La realidad es superior a la imaginación de uno, y cuando tomas la realidad periodísticamente o como combinación, se le facilita a uno más la escritura". FRASE: "La ironía es la mejor arma que tiene un periodista o escritor, nos reímos un poco de la realidad y de las personas de nuestro alrededor, es un argumento muy fuerte y muy importante para nosotros, sin ironía uno se vuelve pedante y solemne", Vicente Leñero, escritor. EL INFORMADOR / ENRIQUE ESPARZA
