Una sicaria en la literatura

GUADALAJARA, JALISCO (14/MAY/2013).- Omar Nieto apostó por el narcotráfico como eje temático en su novela Las mujeres matan mejor. Muchos otros lo han hecho dentro de la literatura mexicana, sin embargo, el poblano de 38 años de edad parte de un nuevo eje en su narración: la mujer sicaria en el Sur del país. El sello editorial Joaquín Mortiz presenta este libro, con el que Nieto quedó como finalista del Premio Letras Nuevas de Novela.

Este texto responde al género de novela negra, mas no en el sentido tradicional, pues toma aspectos técnicos de otros géneros. En él se aborda el narcotráfico y la proliferación de mujeres sicarias que dejan el rol tradicional de la mujer en México, para formar parte de la delincuencia organizada.

Con la ex policía Celeste Ramírez como personaje protagónico, esta ficción apegada a la realidad que se vive en el país, narra la venganza que la ahora sicaria emprenderá contra uno periodista corrupto, mientras se enfrenta al cártel enemigo.

“Me interesaba no caer en el cliché mediático de la mujer en el narcotráfico: la estereotipada buchona o pareja de algún capo con el rol de ser glamurosa; me parece que se aleja de la realidad. Se trata de las mujeres que saltan de un cargo de justicia a una agrupación delictiva”.

Con el narcotráfico y la corrupción como escenario principal, Las mujeres matan mejor reflexiona sobre la imposibilidad de escoger un destino en medio de estas circunstancias. El autor se pregunta, ¿en verdad lo escogen o se ven atraídos por una sórdida inercia social?

“Este tema está alrededor de nosotros y al menos en el centro-sur de la república no lo habíamos vivido con esa violencia. El tema estará presente por mucho tiempo en la literatura, y sería antinatural que no lo fuera”, comparte el autor.

Más allá del narcotráfico plantea tramas paralelas como contenido indigenista y la corrupción en el círculo periodístico nacional. Ambos tópicos, explica Nieto, que los retomó de experiencias profesionales.

“Me dediqué cerca de 18 años o más al periodismo, sobre todo en el Centro y Sureste del país. Yo no me atrevo a hablar de este fenómeno en la frontera Norte, porque no lo conozco, al menos no he vivido ahí. Se me daba más natural narrar desde este lado.

“Afortunada o desafortunadamente estuve trabajando en medios de comunicación y en oficinas de Gobierno federal, al menos en cuatro secretarías. Una de ellas ya desapareció, la Secretaría de Reforma Agraria, y ese contenido de la novela salió de ahí. Así constatas el grado de marginalidad que persiste en México. La novela, en ese aspecto, no es de denuncia, ni realista, sino que parto de la ficción para llegar a desgranar un poco el aspecto humano”.

A pesar de mantener presente su quehacer periodístico, Omar Nieto deja la nota dura para narrar desde la psicología de una mujer, sobre cómo va atravesando por los distintos escenarios de la sociedad mexicana.