Ovación de pie para Ernesto Cardenal en su presentación

GUADALAJARA, JALISCO (06/DIC/2014).- Una ovación de pie y sonoras exclamaciones dieron el toque de clausura a la presentación del libro "Noventa en los noventa" (Ed. Trilce, 2014), del poeta nicaragüense Ernesto Cardenal que, con motivo de la celebración por sus 90 años de vida se puso en circulación en esta edición de la FIL de Guadalajara y fue presentado por Sergio Ramírez, Hernaldo Zúñiga y el traductor del escritor al alemán, Lutz Kliche.

Antes de comenzar las intervenciones, Débora Holtz, editora del volumen, destacó que este festejo a Cardenal no es solamente por ser "un gran poeta" sino, también, porque "ha hecho de la entrega una forma de vida", de ahí que esta "selección irrepetible" de textos se encomendara a Sergio Ramírez, tras una cena que les reunió con Zúñiga y de la que surgió la idea del homenaje.

Símbolo de esperanza

Así, cuando Kliche tomó la palabra, fue para relatar al público cómo la obra de Cardenal se publicó por vez primera en Alemania a fines de los sesenta y se convirtió en "profeta y visionario para una generación" en Europa; aunque también en Nicaragua, antes y después y tras el "desmontaje ético" de una revolución ante la cual sostuvo siempre la verdad, por lo que le juzga "un símbolo de esperanza para el mundo entero".

De igual modo, a través de anécdotas el cantautor Hernaldo Zúñiga no sólo comentó la influencia recibida de parte de la obra de Cardenal, se nombró como "un colado gozoso" a la celebración del poeta y reconoció la "deuda" que paga porque leer a Cardenal fue para él "la detonación del amor por la palabra escrita, que siempre sonaba a nuestro tiempo".

Poeta, amigo y vecino

Por su parte, Sergio Ramírez no se detuvo en el recuento de una "amistad de muchos años" que mantuvo con el poeta -que además fue su vecino-, a quien conoció cuando regresaba de sus estudios en el seminario; así, hizo énfasis en que "me formé como narrador con las posibilidades que la poesía ofrecía".

De este modo, el reciente ganador del Premio Carlos Fuentes, refirió que junto a Cardenal compartió "dichas y amarguras" durante la revolución de su país y hechos posteriores, además de visitarle más de una vez en la que fuera la comunidad fundada por el poeta en la isla de Solentiname (a dónde llevó a Cortázar, en 1976); por eso y más, fue que Ramírez, sin dejar de ser breve, enfatizó que escoger los 90 poemas del libro y escribir su prólogo ha sido "una de las misiones más lindas de mi vida".

Finalmente, tocó al poeta ofrecer la lectura de sus poemas, un conjunto en el que siguió un criterio cronológico; de esta forma, desde "Al perderte yo a ti" y hasta "El celular" (uno de sus poemas más recientes), pasó por "La resurrección", su oración por las cigarras; "La noche iluminda de palabras", donde se habla de su estancia en un monasterio trapense en los Estados Unidos; para recibir una ruidosa exclamación de júbilo cuando leyó uno de sus textos más famosos: "Una oración por Marilyn Monroe".

Cardenal recibirá también un homenaje en la Ciudad de México este próximo 13 de diciembre, cuando ofrecerá un recital poético en el Palacio de Bellas Artes.

EL INFORMADOR / RICARDO SOLÍS