Octavio Paz, el héroe de los rebeldes

GUADALAJARA, JALISCO (20/SEP/2013).- A un año de cumplir un centenario de su nacimiento y luego de 15 anualidades desde su muerte, el espíritu de Octavio Paz sigue siendo el de un rebelde, crítico de la cultura y del oficialismo, que no paraba de pelearse con mexicanos famosos e influyentes como los muralistas, y vivía confrontado con el sector literario nacional, hasta que ganó el Premio Nobel.

"Octavio Paz se perfila como el héroe moderno que enfrentó pruebas tan peliagudas como el héroe de la antigüedad, y salió victorioso de la mayoría de ellas. No de todas, de la mayoría", opina la investigadora y escritora francesa Fabienne Bradu, quien asistió la noche de este jueves al Colegio de Jalisco para la presentación de dos libros que analizan las obras del poeta. El primero de ellos es de autoría del antropólogo e historiador francés, Jacques Lafaye: "Octavio Paz. En la deriva de la modernidad", que consiste en siete ensayos sobre la obra del poeta mexicano; y el otro, "Octavio paz, la palabra y libertad", coordinado por el mismo autor, es un compendio de ensayos de escritores como Christopher Domínguez, Jorge Esquinca y Jesús Silva Herzog, entre otros.

"México le disgustaba mucho a Octavio Paz. Cada que regresaba estaba el teléfono desconectado o el ascensor averiado. Por eso dijo: 'En México todo se hace al aventón y sale a la chiripa'", recuerda con humor Lafaye, quien fue su amigo en vida y trabajó con él en la revista "Plural", que a la postre se convertiría en "Vuelta".

"Octavio Paz. En la deriva de la modernidad" contiene además diversas fotografías del autor en su juventud, retratos del poeta, cartas y otros documentos inéditos. A través de sus páginas, se explora su inspiración en el escritor Albert Camus como modelo ético, así como sus semejanzas biográficas con Sor Juana Inés de la Cruz, entre otros aspectos de su biografía como escritor y su obra en relación con distintos autores.

El libro, resultado de los años que Lafaye ha pasado en Guadalajara trabajando en el Colegio de Jalisco, expresa una admiración crítica sobre su obra, que no cae en la adulación fácil, sino que reconoce su grandeza literaria pero también las flaquezas de su personalidad, opina Bradu.

Por su parte, "Octavio Paz, la palabra y libertad" descubre la capacidad de Paz de conectar culturas y de su vasto bagaje a través de "un caleidoscopio de imágenes del poeta a diferentes distancias y perspectivas", según describe el lingüista Juan José Barrientos, quien también asistió a la presentación de ambos títulos.

Barrientos critica que a un año del centenario, el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes no tenga todavía un proyecto de conmemoración y que a la fecha, México no cuenta con un museo o casa conmemorativa del único escritor mexicano galardonado con un Nobel, pese a que "quizás él (Paz) no hubiera sido partidario de este tipo de homenajes, porque le hubiesen parecido demasiado solemnes".

Pero independientemente de lo que el Gobierno haga con su legado, Lafaye insiste en que Paz debe recordarse como un partidario de la digresión. "No faltan jóvenes mexicanos que ven ahora a Octavio Paz como un personaje oficial. Pero el que va a quedar en la memoria y en la historia con su obra escrita, será el Octavio combativo de 1848 y 1868", escribe en uno de sus ensayos.

PARA SABER

"Octavio Paz, la palabra y libertad", editado por el Colegio de Jalisco, se vende en la librería de esa institución con un costo de 300 pesos. Además del libro, se incluye un documental hecho por el etnógrafo estadunidense Robert Garden.

"Octavio Paz. En la deriva de la modernidad", editado por el Fondo de Cultura Económica (FCE), está a la venta en la librería José Luis Martínez por 150 pesos. También está disponible en formato de libro electrónico, el cual se puede adquirir en la página del FCE.

EL INFORMADOR /BRENDA RAMOS