México posee calidad en sus orquestas, dice Pérez Santoja

CIUDAD MÉXICO (04/AGO/2013).- En el país existen un número importante de orquestas sinfónicas y filarmónicas, además de cámara, que de manera periódica llevar el arte de la composición a aquellos que desean conocer lo mejor de la música nacional y del mundo con un nivel de calidad.

Algunas de ellas, las más conocidas, son las que cumplen periódicamente con temporadas de conciertos, al menos uno al año, en las que interpretan composiciones universales, hayan sido creadas por músicos extranjeros o nacionales, y de tiempos pasados -la mayoría- o actuales.

Consultados, los reconocidos melómanos y musicólogos Luis Pérez Santoja y Juan Arturo Brennan, ambos por su parte colaboradores con diferentes orquestas y quienes llevan a cabo la crítica musical a través de diferentes medios, hicieron un análisis del "estado de salud" de las orquestas y los conciertos que ofrecen para el público mexicano.

Pérez Santoja, responsable por muchos años de la legendaria tienda de música Margolín, hoy desaparecida, enumeró algunas de las orquestas de las que pueden disfrutar los mexicanos, como la Sinfónica Nacional, que dirige Carlos Miguel Prieto.

Otras son la Orquesta Filarmónica de la Universidad Nacional Autónoma de México (OFUNAM), que dirige el músico inglés Jan Latham-Koenig, y la Filarmónica de la Ciudad de México, de la que está al frente José Areán.

También está la Orquesta Sinfónica de Minería, que dirigen Prieto y Areán, que tiene la característica de tocar únicamente en el verano y se compone de músicos de diferentes agrupaciones que existen en México, como las de la capital del país y de otras entidades.

Precisó que esta agrupación pertenece a la Facultad de Ingeniería de la UNAM, a través de lo que se llama Academia de Música del Palacio de Minería.

Igualmente se encuentra la Orquesta de Cámara de Bellas Artes, que la dirige José Luis Castillo, y la Orquesta Sinfónica del Instituto Politécnico Nacional, que hasta poco la dirigía Gabriela Díaz y hasta ahora no cuenta con quien esté al frente de ella.

Una más es la Orquesta Sinfónica del Estado de México, dirigida por Enrique Bátiz, y también se pueden contar a la Sinfónica de la Universidad del Estado de Hidalgo, la Sinaloa de las Artes y la de la Universidad de Guanajuato.

En términos generales, para Pérez Santoja se puede decir que de las mejores del país son las que se encuentran en el Distrito Federal, y no tiene esto que ver que estén asentadas en la capital mexicana sino más bien porque tienen más tiempo nombradas, establecidas.

Porque han reunido músicos de muy buen nivel, para lo que hay un número importante de extranjeros que son necesarios en ciertos instrumentos, y quienes además llevan un gran número de años en el país, 15, 20 o hasta 30 años, e incluso ya tienen su familia aquí o en México la formaron, dijo.

Todos estos y otros son factores determinantes para que tengan un buen nivel, como un apoyo institucional que les permite hacer audiciones y cambiar instrumentistas cuando es necesario y en general cuentan con mejores condiciones para su trabajo.

Por lo que se refiere al salario como factor determinante para que una orquesta desarrolle lo mejor que tiene, expuso que al parecer está bastante parejo entre las agrupaciones que hay en la República.

Incluso, mencionó, existen orquestas que exigen que se les equiparen los sueldos con los que tienen las demás, pero en general tienen salarios equivalentes. La capacidad del director no es un factor que determine, por lo menos en la actualidad, que una orquesta desarrolle lo mejor que tiene, anotó.

Citó el caso de la OFUNAM, que tiene actualmente un buen nivel que ha mantenido por mucho tiempo, y ha sido independientemente de los directores que ha tenido en los últimos años, que han sido varios. Incluso, durante algunos lapsos ha carecido de responsable y no ha bajado su nivel, explicó.

El director incide más en el tipo de interpretación que se hace de una obra, en los matices, a veces en la intensidad que le pueda dar a una interpretación, al repertorio que elige y que sea más adecuado para la orquesta que se tiene. En el caso de México, en otros países las cosas pueden ser diferentes, acotó.

Recordó otro caso de una orquesta que estuvo varios años sin un director y que sin embargo mantuvo su nivel: la Filarmónica de la Ciudad de México, la cual ahora empieza a adquirir una personalidad musical propia, que a lo mejor había perdido en ese lapso.

El experto consideró que, en general, el país goza de un buen nivel en las orquestas que tiene, y como consecuencia con los conciertos que escuchan los mexicanos. Cualquiera de las orquestas logra conjuntar una buena interpretación y una buena dirección de un programa determinado y se llega a tener un concierto del nivel de cualquiera de las orquestas internacionales.

Sobre el tema, Juan Arturo Brennan, quien es guionista, realizador, productor, conductos de programas culturales de radio y televisión,  y crítico musical en medios impresos, dio su punto de vista y estimó que calificar si existe una mejor orquesta que otras en el país es un asunto subjetivo.

El coautor del guión de la película "El año de la peste", junto con el Premio Nobel de Literatura Gabriel García Márquez, por la que obtuvo un Ariel y la Diosa de Plata, expuso que además son pocas las orquestas de los estados que asisten a la capital del país y las de aquí poco van a las entidades.

Por ello, comentó, un crítico de cualquier entidad, que además puede viajar poco a estados diferentes al de él para apreciar a una orquesta, también tiene poco elementos para juzgar lo que hace una formación de una entidad diferente.

Brennan, quien estudió realización y fotografía de cine en el Centro de Capacitación Cinematográfica, y es miembro del consejo de redacción de la revista "Pauta", expuso las que considera las principales características que debe cumplir una orquesta para ofrecer conciertos de calidad.

El redactor de notas de programa de producciones discográficas y de diversas orquestas, impartidor de cursos y conferencias de apreciación musical y becario del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca) en dos ocasiones mencionó en primer lugar el que cuenten con un director artístico titular.

Estimó que las que tienen uno invitado regularmente no tienen buen nivel porque les falta continuidad, el trabajo que se logra cada semana y añadió que otro factor es la condición sindical, porque a veces los problemas de esta índole van en detrimento de la calidad.

Asimismo, una característica que deben cumplir las orquestas para lograr un buen nivel de interpretación es la calidad de sus músicos, de su repertorio, de la sala en que toca y la de su público, porque todo ello influye directamente, pues se trata de un ciclo de retroalimentación que no siempre se cumple de la forma ideal.

Estrictamente lo que ocurre es que las mejores son las que cuentan con un soporte institucional, y fundamentalmente muchas de ellas se encuentran en la capital del país, como la Filarmónica de la Ciudad de México, la OFUNAM, la Sinfónica Nacional y la de Minería, comentó.

Fuera de aquí la del Estado de México, la de la Universidad de Nuevo León y la de Xalapa, y cada una de ellas tiene cualidades muy especiales.

Mencionó que un caso es la de San Luis Potosí, que le han dicho que toca bien pero que no podría afirmarlo porque tiene mucho tiempo que no la ha escuchado, pues últimamente no ha visitado la capital del país.

Brennan refirió que es fundamental la calidad del director que tengan; uno disciplinado y disciplinario le puede hacer mucho bien a una orquesta contrario a uno tirano o también uno blando, que exige poco y simplemente se va con el flujo.

Éste, abundó, le puede hacer daño al grupo en el entendido de que su estándar de exigencia a cada músico, y de esa manera al colectivo, va a bajar porque el propio no es bueno.