Las historias de una misma memoria

GUADALAJARA, JALISCO (26/NOV/2012).- Había una suerte de voces encontradas. La dictadura argentina por aquí, la dictadura argentina por allá. Leopoldo Brizuela hizo un alto para hacer un ejercicio de memoria. ¿Qué recordaba de todo aquello? Él era un niño de apenas 12 años y tenía una versión de lo sucedido. Esa versión está vaciada en la novela Una misma noche, que fue distinguida con el Premio Alfaguara a principios del año y que en esta oportunidad será presentada en la Feria Internacional del Libro 2012 (FIL).

"Creo que sí hay una inquietud de los argentinos por la argentinidad, no exactamente en términos de nacionalidad. Pero evidentemente sí hay una indagación sobre la experiencia, esa experiencia en términos históricos. Pero más bien una gran preocupación de los argentinos, creo yo, por la memoria, no sólo de determinados hechos, sino pro la memoria como mecanismo en sí, eso es muy notorio", asegura Brizuela para explicar cómo las diferentes estéticas de artistas oriundos de Argentina destacan su propia condición para darla a conocer a todo mundo.

El tema de la dictadura es socorrido, ampliamente investigado, documentado y con asuntos legales aún hoy por resolver en querellas interminables. Pero el autor también de Inglaterra apeló, ahora más que nunca, a la antítesis de esas empresas exhaustivas en cerros de documentos. Más bien hizo la reconstrucción de los como testigo presencial.

"En esta novela hubo todo un trabajo contrario. No quería investigar nada. Fue un trabajo muy apasionante para mí porque después de años y años y años de escuchar, ver leer sobre la dictadura, películas, libros, revistas. Por primera vez quería saber que me acordaba de todo ello. Así que el primer trabajo fue investigar en la propia memoria. Como desbaratar todo lo que estaba impuesto sobre la propia memoria y entonces ese trabajo apasionante fue meterme a esa cabecita de un chico de 12 años y a ver qué percibía, y a partir de eso saber qué entendía, qué sabía", señala Leopoldo Brizuela al respecto de cómo construyo este trabajo que ahora presenta en la feria tapatía. Debió de apelar mucho a la tradición oral, a recordar las palabras de aquellos que, asegura, o lo sabían todo o no sabían absolutamente nada.

El proceso le resultó liberador, sobre todo como autor, y que ahora, derivado del premio que obtuvo, lo embarca en una gira en la que ha visitado 18 países, lo agota pero le deja diferentes aprendizajes que, aún hoy, le resulta complicado enunciar, ya que considera muy reciente todo.

Hay proyección a escala internacional y esos ingredientes siempre son bienvenidos, ya que le han ofrecido otras lecturas de su propia creación.

Leopoldo Bruzuela se ha refugiado en los resquicios que le fajan las mañanas que no tiene que hacer promoción de su novela en los más recientes meses. Escribe una novela de amor; tiene algunas notas sobre ello y la retomará en cuento culmine los diferentes pendientes que le ocupan hoy. Esta vez sus ejercicios de memoria parece que serán más a corto plazo y, por qué no, con la idea de que obtenga más o menos los mismos resultados que Una misma noche.

PARA SABER

Una misma noche. Premio Alfaguara 2012
Salón 5, planta baja, Expo Guadalajara
Autor: Leopoldo Brizuela

Presenta: Andrés Neuman, Sergio Ramírez
A las 18:00 horas

AGENCIA INFORMADOR / JUAN LEVID