La realidad desde la ficción

GUADALAJARA, JALISCO.- Hace un año, la Feria Internacional del Libro dedicó buena parte de su programa a celebrar la trayectoria de Carlos Fuentes, uno de los escritores más destacados del país; hoy, de nueva cuenta se abrió un espacio para el autor, quien trae bajo el brazo su más reciente novela Adán en Edén, la cual surgió de una noticia y en las páginas de la obra editada por Alfaguara se ha convertido en una “verdad ficticia”.

“En esta novela intenté mezclar géneros, hay desde luego una relación crucial con lo que se llama en literatura la pequeña historia, que es realmente la noticia de prensa, grandes novelas se han basado en la pequeña historia. Hay una relación entre la novela y la prensa”, dijo la tarde de ayer el autor en el Auditorio Juan Rulfo, en la sede del encuentro librero.

Raúl Padilla, presidente de la Feria Internacional del Libro (FIL), se encargó de hacer la presentación del también escritor de En esto creo, y advirtió que la nueva novela “combina la comedia y el drama, contiene investigación periodística, por supuesto, ficción, con un primer plano de farsa que balancea el fondo oscuro del relato, pasajes de ensayo sobre los graves fenómenos que acontecen hoy por hoy en América Latina y las reflexiones más personales que el autor filtra a través de sus personajes en la narración. Con esta obra, nos llega una vez más su vasta novelización de la contemporaneidad”.

Reconoció de Fuentes su ácido humor, “su no dejar nada sin nombrar, su gran capacidad de análisis no sólo de todo lo que ocurre en México, sino en el mundo y su función crítica, pero no únicamente a modo de opinión adversa, sino también como juicio revelador de las realidades paralelas a la realidad que vivimos todos los días”.

Marisol Schulz, de Alfaguara, tomó la palabra en breve para destacar que Adán en Edén tiene mucho qué ver con las desilusiones y la desesperanza, e invitó a los asistentes a sumergirse en esta obra que juega con diversos géneros.

En tanto que el propio Carlos Fuentes, destacó que en la novela hay además una mezcla de humor y horror, “tiene que ver con el narcotráfico, con el crimen, la violencia”.
A continuación ofreció a los asistentes un extracto de la novela, para animarlos a acercarse a ella, y refirió que “es posible ver en ella como un noticiero de la actualidad mexicana, hay una pequeña historia inserta en la gran historia de nuestra actualidad, una actualidad que podría ser vista como un melodrama, pero la mejor definición de melodrama que he escuchado es que melodrama es la comedia sin humor. Yo prefiero la comedia con horror y es lo que ofrezco en esta novela, a fin de hacer conscientes las convenciones que rigen tanto a la prensa, como a la historia, como a la ficción misma, a fin de explorar constantemente, y creo que es una de las misiones del novelista, la otra manera de decir las cosas y al fin y al cabo de usar un lenguaje, el del novelista, para iluminar otro lenguaje que es el de la prensa, el de la política, el del crimen y el del sexo”.

A continuación, los actores Gonzalo Vega y Ana Colchero adentraron a los asistentes en la historia de Adán a través de una lectura dramatizada.