“La poesía se produce de la nada”

GUADALAJARA, JALISCO (04/DIC/10).- Con traje oscuro, lentes colgados del cuello y un anillo de bodas dorado, Antonio Gamoneda, el escritor que encabeza la delegación de Castilla y León, apareció ayer por los pasillos de la FIL. En un encuentro con los medios de comunicación, Gamoneda describió sus terrenos poéticos, en los que la pobreza siempre está presente, porque durante su infancia vivió en una situación precaria.

“Hay una poesía que es peculiar de la pobreza y, en cierto modo, exclusiva de la pobreza”, expresó el autor. Y citó como ejemplo la Nana de la cebolla de Miguel Hernández: “En la cuna del hambre mi niño estaba”, para mostrar “que hay una poesía que nace de la pobreza”.
Agregó que hay una cultura y una literatura de la pobreza, presente en la obra cumbre de Miguel de Cervantes, El Quijote, que es “una continua sucesión de poesía narrativa, en la cual siempre hay opresores y oprimidos, ricos y pobres, poderosos y menesterosos”.

El autor de Edad explicó que su proceso creativo no tiene temáticas previas, como ocurre con los poetas realistas. Su obra, dijo, “no busca expresar nada. Quiero decir que no tengo un programa previo, no tengo una intención temática a priori; lo único que ocurre es la capacidad de generación del pensamiento poético”. 

Para explicar ese proceso creativo, recurre a la ciencia: “¿Qué se puede crear? Lo que no existía. ¿Qué se puede revelar? Lo que se desconocía. Si poesía es creación y revelación, parece que no es muy adecuado el conocimiento previo. (Entonces), la  poesía se produce de la nada”.

 “Yo estoy más cerca, a pesar de mi agnosticismo, del frailecito maravilloso que era Juan de Yépez o con San Juan de la Cruz, cuando decía que la experiencia mística, en caso de que se dé realmente, es inseparable de la experiencia poética y hasta puede que sólo se trate de experiencia poética. Y San Juan de la Cruz hablaba de no saber sabiendo, de un entender no entendido, de un no sé qué que estaba enunciado; si no es la definición, es la mayor aproximación que se haya hecho a la naturaleza del pensamiento poético. Así anda la poesía afortunadamente perdida o extraviada”.  

La escritura realista
    
El escritor lamentó la situación actual de la poesía española, que en los últimos 50 años “ha tenido una vía descendente; no es comparable con el soberbio momento de la poesía de preguerra”.

Dijo que considera que la desorientación de la poesía española es mayor a la de Latinoamérica, lo cual, según el ganador del Premio Cervantes 2006, es responsabilidad de los escritores que “han pensado que deben hacer una escritura realista con lenguaje normalizado, que a su vez sea una crítica del sistema dominante; la poesía no es un lenguaje normalizado, es un lenguaje impredecible, es un no saber sabiendo, como decía San Juan de la Cruz”.

Señaló que en todos los países hay elementos tecnológicamente fuertes que “ocupan o absorben la sensibilidad de las personas, como la televisión, el cine, la publicidad y las canciones, por lo que el territorio poético ha quedado reducido debido a que es limitada la capacidad humana de recepción y de estímulos estéticos para la sensibilidad. Estos poderes tecnológicos, que por cierto los maneja el capitalismo, verdaderamente están ocupando gran parte de nuestra capacidad receptiva; por eso la poesía está pequeñita y empobrecida”. 

Aunque el panorama es lamentable, el futuro parece mejor, ya que los poetas menores de 30 años están “comenzando a darse cuenta que el realismo no es el camino de la poesía y lo están abandonando”, opinó Gamoneda, antes de continuar: “El realismo es necesario en los mítines, en la prensa y en los medios informativos; en la poesía es otro lenguaje que no puede modificar las circunstancias subjetivas, pero sí puede intensificar la conciencia de los lectores”.