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Cultura | Presenta su libro, La Música, en la sala Elías Nandino del Ex Convento del Cármen

La música de Eusebio Ruvalcaba

Presenta su libro, La Música, en la sala Elías Nandino del Ex Convento del Cármen

Por: EL INFORMADOR

El poeta Eusebio Ruvalcaba, en imagen de archivo. ESPECIAL  /

El poeta Eusebio Ruvalcaba, en imagen de archivo. ESPECIAL /

GUADALAJARA, JALISCO (23/SEP/2011).- La presentación del reciente libro, La música, del poeta Eusebio Ruvalcaba no fue un concierto de pop si se toma en cuenta el número de asistentes, tal vez fue un concierto de cámara. El público juvenil y universitario no lo eligió, prefirió la conferencia del filosófo Jorge Manzano, arriba, pese al calor que se sintió la noche del pasado miércoles en la sala Elías Nandino del Ex Convento del Carmen.

Pero Eusebio Ruvalcaba tuvo sus escuchas, menos de 30, y entre ellos se encontraban el músico Kamuel Zepeda, el escritor Raúl Bañuelos y el periodista Juan Carlos Núñez Bustillos, así como dos jóvenes del sitio www.kajanegra.com que realizan un documental del escritor jalisciense e hijo del músico Higinio Ruvalcaba.

Antes de comenzar la presentación, el autor firmó varios libros acompañado por un tequila y después subió al escenario acompañado por Javier Reyes, de la Universidad de Guadalajara; Elba Castro, coordinadora de la maestría de Educación ambiental de la casa de estudios del Estado; Jorge Orendáin, de la Editorial La Zonámbula; y  Jorge Souza, director de Literatura de la Secretaría de Cultura (SC) de Jalisco.

Para comenzar los discursos, el vino tinto acompañó a la mesa de ponente y hasta hubo segunda ronda.

Eusebio Ruvalcaba comenzó su intervención con una evocación a su padre y decidió mejor no hablar, sino leer algunos poemas de su reciente trabajo inspirado por la música.

“No puedo dejar de evocar a mi padre, don Higinio, porque tengo la vieja costumbre de llorar  y eso no le gusta a las mujeres”, dijo el autor y poeta, quien estuvo entre sus amigos en la presentación.

Consideró que la música como los bellos momentos de la vida son irrepetibles y expresó: “me latiría leer un par de poemas”. El primero que se escuchó es el titulado Beethoven: “Dicen que Jesucristo le tuvo envidia (…) si mi padre me hubiera escuchado decir esto, me hubiera dado una cachetada. Mi padre era un hombre religioso, recalcitrante, traía en el estuche de su violín tres vírgenes: la de Talpa, la de Zapopan y la de San Juan de los Lagos y decía si toco el violín es por ellas, no por mí, me repitió una gran cantidad de veces que él no tenía talento, el talento es de ellas, era su modo de ponerse a mano con la divinidad”.

Y añadió que no hubiera leído ese poema si su padre estuviera en la sala. “Dicen que Jesucristo le tuvo envida, le envió la sordera para silenciarlo, pero no pudo, mejor lo hubiera matado. Dicen que a Beethoven se le mira en el Paraíso haciendo música, que es incontenible, nadie lo invitó y está ahí…”, leyó el autor, quien desde febrero pasado es perseguido por los jóvenes de Kajanegra para registrar a Eusebio Ruvalcaba.

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