Cultura | Participación de `La Corregidora` en el movimiento de lucha La mirada de la Independencia a través de Doña Josefa Ortíz de Dominguez ¡Cállate Josefa! es una obra que rinde honor a `la Corregidora`Josefa Ortíz de Dominguez Por: NTX 1 de marzo de 2010 - 10:57 hs MÉXICO.- La puesta en escena 'íCállate Josefa!', que rinde honor a Ortiz de Domínguez, Corregidora de Querétaro, fallecida el 2 de marzo de 1829, es la primera producción que la Coordinación Nacional de Teatro, del Instituto Nacional de Bellas Artes, inscribe en el marco de las conmemoraciones de 2010. La trama se basa en los antecedentes del movimiento de Independencia, en la crisis social y política que se registró en el país a través de la mirada de la heroína María de la Natividad Josefa Ortiz Girón, mejor conocida como Doña Josefa Ortiz de Domínguez. Estrenada el año pasado, 'íCállate Josefa!' se presenta sábados y domingos en el Teatro Orientación del Centro Cultural del Bosque, en esta capital. Ella nació el 8 de septiembre de 1768 en Valladolid, hoy Morelia. Sus padres fueron Juan José Ortiz, capitán del regimiento de Los Morados; y de Manuela Girón. Su padre fue asesinado en cumplimiento con su deber, cuando ella era apenas una niña. Su madre murió poco tiempo después. De esta suerte, la que años después sería la Corregidora de Querétaro quedó a cargo de su hermana mayor, María Sotero Ortiz, quien apoyó a Josefa para ingresar al prestigiado Colegio de las Vizcaínas de la Ciudad de México. Se casó con Miguel Domínguez, visitante frecuente a aquel colegio, en el año de 1791. En 1802, Miguel Domínguez fue promovido por el virrey de Nueva España al cargo de Corregidor de la ciudad de Santiago de Querétaro. Durante ese tiempo, doña Josefa quedó a cargo de las tareas domésticas y al cuidado de la educación de dos hijos suyos, habidos en un matrimonio anterior de su marido. Tanto ella como su marido, Miguel Domínguez, corregidor de Querétaro, tomaron parte de los planes de conspiración a favor de la Independencia; pero sus planes fueron descubiertos. Doña Josefa se identificaba con el abuso sufrido por la comunidad de criollos por parte de los gachupines, tal como llamaban a los españoles nacidos en la península: ella misma era una criolla. Los criollos eran considerados como ciudadanos de segunda clase por el régimen colonial, en virtud de haber nacido en la Nueva España (una colonia) y no en la metrópoli. Por ello, eran relegados a puestos de segundo nivel en la administración pública del virreinato. Ese hecho creó un gran descontento con el paso de los años, y los criollos comenzaron a organizarse en diversos grupos literarios, culturales y políticos, donde se difundían las ideas de la Ilustración, prohibidas en ese entonces por la Iglesia Católica. Doña Josefa se integró en una de estas sociedades y convenció a su esposo tiempo después, de integrarse también a ella. Después de la planificación, los rebeldes estaban listos para levantarse en armas el 1 de octubre de 1810. Sin embargo, el 13 de septiembre fueron descubiertos por un infiltrado, que informó a las autoridades del virreinato de las actividades del grupo literario de Querétaro. El corregidor Miguel Domínguez fue obligado a conducir un cateo en las casas de la ciudad, con el propósito de capturar a los líderes insurgentes. Para protegerla, encerró a la corregidora en un cuarto bajo llave. No obstante, lo anterior, Josefa Ortiz de Domínguez pudo advertir al cura de Dolores, Miguel Hidalgo, haciendo sonar uno de sus zapatos y así un criado de su casa la oyó y bajo mandato de ella advirtió al cura que la conspiración había sido descubierta. Fue por ello que el párroco (Miguel Hidalgo), convocó al pueblo a levantarse en armas la madrugada del 16 de septiembre de 1810, con lo que dio inicio hace 200 años, la guerra por la Independencia de México. El virrey hizo encerrar a Doña Josefa Ortiz en el convento de Santa Teresa la Antigua en la Ciudad de México y posteriormente en el de Santa Catalina de Sena. Ella, ante la ingente necesidad de dar aviso a los líderes del movimiento, obtiene el auxilio de uno de sus ayudantes y éste se traslada a San Miguel el Grande y luego a Dolores para comunicar tanto a Hidalgo y a Allende la caída del telón que cubría a la conspiración. En 1823, cuando fue liberada del claustro en el que se encontraba, fue objeto de condecoraciones y títulos que rechazó de manera enérgica. "La dama de la insurgencia" o "La Corregidora" son algunos de los sobrenombres que le fueron atribuidos después de su forma heroica de proceder. Posteriormente se afilió a grupos liberales radicales, simpatizantes de las logias masónicas de la doctrina yorkina. Doña Josefa Ortiz de Domínguez falleció a los 61 años de edad, el 2 de marzo de 1829, en la Ciudad de México, víctima de una complicación respiratoria pleuresía. Sus restos mortales fueron exhumados y llevados con grandes honores a la ciudad de Querétaro, donde hoy reposan. Temas Teatro Secretaría de Cultura DF Bicentenario Independencia Lee También Descubren canales de hace 4 mil años por los predecesores de los antiguos mayas Rutas de camiones detendrán sus recorridos el domingo 24 de noviembre en la ZMG ¿Cuándo termina el censo de "Salud Casa por Casa" y qué preguntan en el cuestionario? ¿Cuándo empieza el programa Salud Casa por Casa? Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones