La India bajo la mirada de Margo Glantz

GUADALAJARA, JALISCO (26/NOV/2012).- Quince minutos antes de las 19:00 horas Margo Glantz camina en la planta alta de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, frente del Salón Elías Nandino en el cuál presentará "Coronada de Moscas", su más reciente trabajo literario.

"Mira es ese", le dice su acompañante Alina López Cámara y apunta al lugar. Margo voltea pero sigue de largo a la espera de que la sala se desocupe.

Faltan diez minutos para la hora de la presentación del libro y ninguna de las personas que están formadas la mira al verla pasar, ese es uno de los encantos de la FIL: los escritores pueden mezclarse entre los visitantes y desdibujarse en el paraíso de las letras, al menos por unos momentos o mientras esperan la hora de su ponencia.

En un abrir y cerrar de ojos una gran cantidad de personas abarrotan el pasillo y la organizadora del evento dice "dos filas por favor" y la gente le obedece, minutos después entran al salón.

La Julia Roberts de la literatura -como se denominó a ella misma tras ganar el Premio FIL en Lenguas Romances 2010- aparece momentos después en el lugar acompañada de la fotógrafa Alina López Cámara y del escritor francés Phillipe Ollé.

"Coronada de moscas" es presentado como un encuentro de escritora y fotógrafa en un mismo territorio: La India, lugar que cambió para siempre la vida de Margo Glantz.

Ollé le da el micrófono a la autora, quien se suelta ante la audiencia.

"Me cimbró a tal extremo que como escritora me sentí en la obligación de documentarlo, la India merecía un libro aparte", comenta la también columnista y catedrática, quién hizo tres viajes al país, con amigos e hijas.

El texto, que se divide en dos partes, alterna impresiones personales de la autora sobre el país asiático y es nutrido con relatos de otros escritores que han estado en el lugar, entre los que destaca el también mexicano Octavio Paz.

Glantz revela que siempre tuvo la intención de viajar a ese rincón del mundo, y que tras haber pospuesto varias veces el sueño, cuando al fin logró consumarlo se dio cuenta de la terrible situación de pobreza extrema en el que viven los indios.

"Es un país que estremece, que lo saca a uno de sus casillas, por eso es un país al que debo volver", revela que pensó tras su primer viaje.

Para que su texto no fuera tan superficial, (debido a que la autora considera que tres meses es poco tiempo para poder retratar a un país), Glantz leyó a otros grandes escritores que han profundizado en el tema como Arundhati Roy, Aravind Adiga, Ananda Coomaraswamy, entre otros para poder dar un contexto adecuado y enriquecer el texto con pero principalmente para poder establecer diferencias y semejanzas.

Aunque la autora encontró similitudes entre México y la India, destaca que fueron mucho más las diferencias debido a la masividad de la pobreza de los indios.

"Mi experiencia fue matizada con otros tantos libros que se han escrito sobre la India", aunque también lo que quisó fue "plasmar esas primeras impresiones que se tienen como turista" que considera que pueden perderse en textos de personas que viven en el lugar y dejan de percibir ciertas situaciones.

La autora mostró su peculiar sentido del humor y simpatía, acompañada de su fotógrafa, a quién describió como una hija.

Por su parte López Cámara, quien colaboró con las fotografías, asegura que quedó muy afectada tras el viaje, y que le pareció increíble que por religión las personas soportaran la miseria ‘con la promesa de que en otra vida les iría mejor’, finalizó.

Una corona de moscas

"¿Era una niña un animal una idea? Ah, señor qué horrible dolor en los ojos, qué agua amarga en la boca de aquel intolerable mediodía en que más rápida más lenta más antigua y oscura que la muerte a mi lado coronada de moscas pasó la vida", es el poema de Blanca Varela del cual la autora se inspiró para el título del libro y que leyó en voz alta para los asistentes.

EL INFORMADOR /  ILSE MARTÍNEZ