Invocan a Bach, pero también al público

GUADALAJARA, JALISCO (02/ABR/2011).-  La noche del pasado jueves Winy Kellner salió a escena acompañado de su guitarra y su experiencia. Es un hombre que domina los trastes de su instrumento; es tan veloz y a la vez tan delicado con las cuerdas de naylon que nadie duda que es miembro activo de la Sociedad de Compositores GEMA en Berlín, Alemania, y que fue ganador de la Beca del CECA 2008 para componer y publicar el Concierto del Valle de Atemajac. El problema es que el foro, para el que fueron colocadas 60 sillas para el recital, sólo fue ocupado por 12 personas.

La Casa Inverso es un espacio que desde 2007 se ha dedicado a la producción, presentación, promoción y difusión de las artes escénicas en el corazón de la ciudad. Cuando Kellner tocaba con delicada parsimonia la obra de Joan Sebastian Bach, lo único que se escuchaba era el eco de las cuerdas y de vez en cuando un freno de motor. La velada era interrumpida por los camiones que transitan sobre la calle Santa Mónica, en su esquina con Reforma.

Dentro de la casona y a lo largo de tres años y medio, el grupo Inverso Teatro ha conseguido que este espacio sea un lugar “donde podemos ensayar, producir y experimentar. Ha sido difícil porque muchas veces no contamos con el apoyo de muchas instituciones o porque hay gente que todavía no conoce el lugar, pero seguimos haciéndole la lucha”, dice Gaby Escatel, integrante del grupo y quien fue la encargada de presentar el recital que estuvo compuesto por música de Bach y Heitor Villa-Lobos.