Guadalajara abre el diálogo sobre obras en fuente de Barragán

GUADALAJARA, JALISCO (11/JUL/2010).- Después de que ayer el Comité Nacional Mexicano del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS) en Jalisco solicitó suspender la intervención a la fuente de las avenidas Arcos y Niños Héroes, diseñada por Luis Barragán, el director de Obras Públicas del Ayuntamiento de Guadalajara, Carlos Uranga, citará mañana a representantes del organismo para tener un diálogo al respecto.

A través de un comunicado enviado a los medios de comunicación, el organismo especializado en conservación de patrimonio cultural señala que con los trabajos del municipio tapatío, que iniciaron en mayo, se están “afectando los niveles originales, el trazo de los dos vasos de agua, los surtidores iniciales y las pendientes de la fuente, modificando así el diseño del arquitecto Barragán”.
Por ello es que el Comité Jalisco de ICOMOS “solicita la suspensión de trabajos, el redireccionamiento de las obras hacia la restauración estricta de este monumento artístico y la intervención de las autoridades federales y estatales, así como de la sociedad civil organizada para rechazar y evitar este evidente desacierto”.

Señala también que esta situación que envuelve a una de las piezas proyectada en plena etapa de madurez de Barragán “es grave y motivo de preocupación. Ya que, después de los trabajos de remodelación en curso, no sería reconocible el diseño de Barragán, perdiéndose una obra significativa del patrimonio mexicano”.

Después de conocer esta información, Juan Carlos Uranga mostró disposición para reunirse con los representantes de ICOMOS, “a pesar de que cuento la autorización de la Secretaría de Cultura de Jalisco para intervenir la fuente que tiene años sin funcionar”.
Agregó que le sorprende la postura del organismo, por lo que tratará de explicarles que el proyecto “está bien sustentado y no atenta contra el patrimonio de Barragán, pues la idea es acercarnos lo más posible al trazo original. Igualmente, escucharemos sus propuestas y dialogaremos para ver qué resolvemos”.

De acuerdo a la Ley de Patrimonio Cultural y Natural del Estado de Jalisco, la glorieta está catalogada como Inmueble de Valor Artístico Relevante, por lo que el nivel máximo de intervención permitido es el de restauración especializada.

El Comité Jalisco de ICOMOS sugiere al Ayuntamiento de Guadalajara que se apegue a la legislación “previo trabajo serio y profundo de investigación documental y por medio de calas en el propio espacio arquitectónico a fin de identificar las características originales que permitan la realización de un proyecto de restauración que revierta las modificaciones anteriores y la recuperación del anillo de piedra bola, actualmente sepultado por un jardín ajeno al trazo original y los niveles originales del conjunto”.

En el comunicado se explica que en principio el trabajos emprendido por el Ayuntamiento tapatío podría ser positivo, ya que la fuente de Jardines del Bosque permaneció abandonada por años. Sin embargo, “se ha podido constatar que están afectando seriamente el trazo original de esta obra, lo cual manifiesta un descuido y la aparente falta de investigación profunda en la realización del proyecto de intervención”.

El ICOMOS consultó un dibujo ideográfico que resguarda la Fundación Barragán en Suiza, que muestra la concepción original del ingreso al fraccionamiento realizada por el alemán Mathias Goeritz y el arquitecto mexicano. En ella se aprecia el eje urbano compuesto por el Pájaro amarillo, de Goeritz, y un alto muro rojo, hoy perdido, diseño de Barragán, y como remate visual el alto chorro de la fuente.

El organismo asesor de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) puntualiza que los componentes de arte urbano pertenecientes a este conjunto arquitectónico están protegidos por la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Históricos y Artísticos, ya que constituyen la creación de uno de los artistas más importantes y más reconocidos dentro y fuera de México.

La conclusión del organismo es que la custodia de la fuente debe estar a cargo de la Dirección de Arquitectura del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) y debería tener declaratoria presidencial de Monumento Artístico, como sucede con otros ejemplos de la obra de Luis Barragán.