Exhiben los insólitos Quijotes de Don Jorge

GUADALAJARA, JALISCO (07/JUN/2015).- Ejemplares tan inauditos del Quijote como la primera edición en México, ilustrados por Salvador Dalí o un libro impreso en corcho forman parte de la muestra "Del Quijote y otros tesoros" que presenta la Biblioteca Pública del Estado de Jalisco Juan José Arreola, con textos de hasta 500 años de antigüedad y la cual exhibe por primera vez acervo del fondo de Don Jorge Álvarez del Castillo donado a la institución en octubre de 2012.
 
De las más de mil ediciones que el bibliófilo tenía sobre las aventuras el noble personaje y su amigo Sancho Panza, se eligieron 19 que son casi 29 libros porque en ocasiones viene editado en dos tomos, explicó Ana María de la O Castellanos, coordinadora de la Biblioteca Histórica.
 
"Por primera vez estamos bajando parte del tesoro de Don Jorge Álvarez del Castillo. Es una colección riquísima, desde las que vienen ilustradas por Dalí, encuadernaciones de corcho y más".
 
Indicó que además de la primera impresión del Quijote en México, de 1833, existen otros textos significativos, como los ilustrados en acuarela que cuentan con fichas académicas y otras dirigidas al público infantil, quienes visitan mucho el inmueble en estas fechas.  "Aprovechamos que se cumplen 400 años del lanzamiento de la segunda edición del Quijote para hacer esta muestra".
 
Detalló que la segunda parte de la exposición está conformada por 83 libros que son de los primeros que se imprimieron en Guadalajara, esto con la intención de que las nuevas generaciones conozcan lo que tienen tanto en el área histórica como la contemporánea de la Biblioteca Pública, colaboración que dio pie a la exhibición.
 
De la O Castellanos resaltó que también de la Biblioteca Álvarez del Castillo se bajó uno de los primeros impresos de Guadalajara que es la Novena a Nuestra Señora de Aránzazu, junto con Elogios Fúnebres. "La imprenta llega a Guadalajara en el 1792 y en el 93 salen Elogios fúnebres de Fray Antonio Alcalde y la Novena".
 
Al finalizar el recorrido los visitantes podrán hacer uso de las nuevas tecnologías, por ejemplo se pueden escuchar partes de El Quijote en iPad y existe un área para que los interesados puedan leer libros contemporáneos de El Quijote.
 
Las actividades de la muestra -que estará hasta el 27 de julio- se complementan con los recorridos guiados a cargo de la escritora Tessie Solinís, quien estará los fines de semana y ofrecerá un taller infantil relacionado con la imprenta los sábados a las 11:00 horas.
 
Una historia para que los niños aprendan a soñar
 
La autora Tessie Solinís encabezará los recorridos familiares  en los que explicará cómo trabajaba la imprenta antiguamente, quién es el Quijote, datos característicos de las ediciones que se encuentran en exhibición con el objetivo-según explica-  de que los niños pierdan el temor a un texto clásico y puedan acercarse a documentos históricos como esta exposición, por lo que en el taller podrán hacer marcas de fuego y reproducir una o escribir una palabra. "En esta época es difícil  que los niños sepan el origen de todas las cosas. Pero vale la pena que sepan el trabajo que se hacía, desde los copistas hasta que la imprenta pudo desarrollarse".
 
Señaló que las historias que hay alrededor de los libros los vuelve más valiosos, como por ejemplo textos libros que fueron prohibidos porque hablaban de magia y numerología o libros utilizados para protegerse en un combate de disparos y que quedaron manchados de sangre. "Características que le llaman la atención a los niños y nos acercan a periodos históricos, no nada más su elaboración sino cómo se utilizó".
 
Sobre la importancia que tiene el que los pequeños se acerquen a una historia como El Quijote, consideró que en palabras de Felipe Garrido El Quijote es un libro que nos hace imaginar o hacer posible lo imposible. "Y eso es algo que los niños deben de tener muy cercano, que uno debe.
 
Horarios
 
Lunes a viernes de 09:00 a 18:00 horas. Sábados y domingos de 09:00 a 17:00 horas en la galería Jesús Guerrero Galván ubicada en la planta baja del edificio histórico de la Biblioteca Pública del Estado. (Periférico Norte 1695).

EL INFORMADOR / ILSE MARTÍNEZ