En Chulavista hay nueva sede de Escuela Municipal de Ballet

GUADALAJARA, JALISCO (04/JUN/2014).- El municipio de Tlajomulco de Zúñiga se ha interesado por recuperar espacios públicos en los que se fomentara la educación, el arte y la cultura, fue así que desde hace un año se gestó la Escuela Municipal de Ballet que actualmente atiende a 300 infantes ubicada en la cabecera del municipio y se buscó a alguien capaz de llevar las riendas del lugar y el candidato ideal fue el maestro Héctor Hernández, hoy director de la institución y que también es padre de los artistas internacionales, Isaac y Esteban.

Este miércoles en la colonia Chulavista se inauguró una segunda sede de la escuela en el Centro Multidisciplinario "El Valle" donde a partir de este jueves se les brindarán clases a 75 niños con el propósito de que el número se incremente a 100. Durante el acto de inauguración se contó con la presencia de Esteban Hernández, quien acompañó a su padre en el evento, así como el presidente municipal de Tlajomulco, Ismael del Toro Castro y el director del Instituto de Cultura, Recreación y Deporte el maestro, Juan Carlos Cornell.

"Es increíble que Jalisco que tiene la fama de ser semillero de artistas, especialmente del ballet, no tenga a esos personajes en el medio internacional. Hemos estado luchando para hacerle entender a la gente que tiene el poder de que sin una escuela seria nunca va a haber un buen trabajo. La gente quiere el fin de todo y no quiere pasar por el proceso para encontrar a los artistas. Queremos un método para desarrollar bailarines mexicanos y que desarrollen su técnica a nivel internacional", explicó para esta casa editorial, Héctor Hernández, quien se integró al proyecto en Tlajomulco a partir de la invitación que le hizo Víctor Bautista, jefe de teatro de la comunidad.

Ahora con el gobierno de Tlajomulco, Héctor Hernández está supervisando que los profesores que él mismo eligió impartan la técnica y la metodología que él ha propuesto y donde no haya espacio para "el amiguismo" como lo llama con respecto a que se favorezca a terceros que son cercanos a las autoridades. "Ellos entendieron y vieron mi trayectoria tanto profesional como académica, me abrieron la puerta para hacer esto con su gente y claro, vamos a trabajar con la comunidad y que los que tengan capacidad las desarrollen, y los que no, que se forme un público adecuado para apreciar el valor del arte".

EL INFORMADOR / ENRIQUE ESPARZA

La comunidad de Chulavista está entusiasmada

La maestra Mónica Masini, encargada de impartir clases en la sede de la Escuela Municipal de Ballet en Chulavista, señala que la respuesta es tan favorable que actualmente hay una lista de espera de 600 personas que desean ingresar a la institución.

Añade que se ha percibido que la escuela tiene un impacto social muy importante: “En las familias, en el tipo de alimentación, la disciplina que están adquiriendo las niñas. Aunque quizá muchas (chicas) no lleguen  a ser bailarinas profesionales, que es lo que se pretendería a largo plazo, lo que está sucediendo es muy interesante, los adolescentes están siendo motivados para tener una opción de vida, tener entrenamiento físico y conciencia de su cuerpo y sus emociones”.

Ya se preparan más audiciones para los niños y niñas que quieran participar. La profesora comenta que es mucho mayor la participación de mujeres que de varones,y opina que quitar el estigma de que el ballet es sólo para jovencitas será otra de las tareas de la institución.

Las clases se imparten de lunes a viernes con una hora y media de entrenamiento.

Ejemplo de disciplina

El bailarín Esteban Hernández vuela hoy a San Francisco para continuar con sus actividades dancísticas; sin embargo, se dio el tiempo para acompañar a su padre en este esfuerzo por crear una escuela para nuevos bailarines. “A mí me da mucha felicidad, porque a través de mi trayectoria y la de mi hermano y todo el trabajo que ha hecho mi papá, se está dando la oportunidad de crear proyectos como estos que son para la gente. El ballet se sigue viendo como elitista, que no alcanza a llegar a las masas, y lo que tratamos de hacer con estos proyectos es inspirar a la juventud a poner sus energías y todo lo que hacen en algo constructivo, como las artes en general”.

Detalla que cuando él comenzó su desarrollo como bailarín no había otro apoyo más que el de su familia y agradece que las autoridades se den cuenta del potencial del arte como medio de formación para la niñez.

Destacó también la labor de su hermano, Isaac, quien “abrió las puertas realmente a la danza aquí en México, salió al extranjero, destacó y abrió el interés de la gente”.

Hasta enero Esteban volverá a tener tiempo libre: en julio estará por tres semanas en París y luego llegará a México por unos días para presentarse en la gala Despertares del 9 de agosto, en el Auditorio Nacional.