El Premio Sor Juana, en manos de Claudia Piñeiro

GUADALAJARA, JALISCO (04/NOV/2010).- La mañana de ayer, la escritora argentina Claudia Piñeiro (Buenos Aires, 1960) se levantó de la cama con una enorme sonrisa tras recibir la noticia de haber sido galardonada con el Premio Sor Juana Inés de la Cruz, porque “es un reconocimiento que uno siempre tiene en la cabeza”.

La escritora, dramaturga y guionista destaca que el premio le llega en un momento muy especial de su vida. “Nunca hay un mal momento para que te reconozcan por tu trabajo, pero en la pasada Feria del Libro de Frankfurt ya me entregaron un reconocimiento, el LiBeraturpreis, y recién terminé mi próxima novela; entonces creo que las cosas se han ido acomodando solas”.

El Premio Sor Juana Inés de la Cruz que otorga la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara se le concedió por su más reciente novela Las grietas de Jara, publicada en 2009 por Alfaguara, en la que describe de manera sutil y despiadada la vida contemporánea de la sociedad, en la que la corrupción y la amoralidad son ingredientes importantes en la trama “que se han instalado en nuestras sociedades”, destaca el acta del jurado.

Por su parte, Claudia Piñeiro afirma que lo que intentó hacer es “poner a personajes cotidianos ante la disyuntiva de una sociedad que está corrupta en lugares de poder, es decir, una persona que no paga impuestos es castigada y una empresa que vale millones de dólares no recibe el mismo castigo. Entonces, lo que intento es reflejar eso, que pertenecemos a una sociedad en la que hay ciertas reglas de juego que algunos pueden trasgredir y otros no”.

La escritora resalta en su obra un suspenso sostenido que la vincula a lo mejor del género policial, lleva al lector a planteamientos tanto éticos como políticos de carácter universal en la sociedad contemporánea.

Sobre el reconocimiento, la escritora agrega que se trata de un premio en lengua española que se otorga a las escritoras “más importantes, y me parece que no hay otro igual que tenga esa trayectoria o prestigio. Es una forma de validación al trabajo que uno hace. Todo eso me da orgullo y mucho agradecimiento para quienes eligieron la novela”.

Claudia Piñeiro considera además un “honor” sumarse a la lista de escritoras argentinas que se alzan con el Premio Sor Juana Inés de la Cruz, como Sylvia Iparraguirre (1999) y Tununa Mercado (2007).

Además del honor, la emoción y la alegría que le causa ser condecorada con dicho reconocimiento, la novelista señala que asume “una gran responsabilidad como escritora, porque ya en sí misma la escritura tiene cierta responsabilidad, porque por más que uno cuente historias hay gente que está leyendo eso y no sabes para quién lo haces”.

Sin embargo, dicha responsabilidad considera que se adquiere con hacer bien el trabajo, “por eso me publican, supongo”, pero lo más importante es que “uno trabaja con la palabra, con las ideas, es decir, valores bastante importantes para la sociedad, entonces eso tiene una responsabilidad que también es política, como cualquier hombre que la tiene con su época y que crece conforme avanza el tiempo y comienza a recibir reconocimiento”.

Piñeiro considera que escribir consiste en “reflexionar y tratar de entender” la vida y admite que “me gusta poner a personajes comunes en situaciones límites y extraordinarias y ver cómo reaccionan en una situación en la que deben tomar decisiones que cambiarán su vida”.

Lectores anónimos

Por cada una de las novelas que tiene publicadas, la escritora argentina señala que “son mensajes que uno lanza en una botella al mar, nunca sabes si alguien los leerá, mucho menos que te vayan a premiar. Además uno no escribe para recibir premios, sino por gusto propio, para estar bien con uno mismo y saldar cuentas de alguna manera”.

En el peleado mundo de las letras, la autora de Tuya afirma que ha tenido “suerte” y ha encontrado un mar de lectores ávidos de historias de ficción, para quienes también extiende su agradecimiento, “porque con ellos es con quien uno genera ese compromiso”.

Por fin, viene a la FIL

De su ausencia en las 23 ediciones anteriores de la FIL, la escritora señala que no ha tenido oportunidad de venir por cuenta propia, ya que tampoco ha recibido invitación para asistir.

“Uno va a donde lo invitan, si antes no he sido requerida, para qué voy. No pasa nada, pero ahora que tengo la oportunidad de ir, es un buen pretexto para saludar a los amigos, porque es en este tipo de eventos donde puedes ver a la gente; ni siquiera con los argentinos me encuentro en mi país”, expresa la también guionista de televisión.

Aún no ha revisado el programa, pero señala que “seguramente habrá conferencias interesantes, sin embargo ahora con la agenda que me espera a partir del Premio Sor Juana Inés de la Cruz, a ver para qué me queda tiempo”.

La autora conoce la Feria Internacional del Libro de Guadalajara porque le han contado sus colegas y amigos periodistas que han asistido. “Yo lo que sé es que es la feria más importante de las letras hispanas, los encuentros que programan, los escritores que asisten, en fin, es la fiesta del libro y vamos a celebrarlo”.

El dato

El Premio Sor Juana Inés de la Cruz es un reconocimiento al trabajo literario de las mujeres en el mundo hispano instituido en 1993, que premia a la autora de una novela publicada originalmente en español. El premio está dotado con 10 mil dólares en efectivo para la autora ganadora.

El galardón fue concebido por la escritora nicaragüense Milagros Palma, con la idea de entregarse al término del cuarto Simposium Internacional de Crítica Literaria y Escritura de Mujeres de América Latina, durante la Feria Internacional del Libro de Guadalajara de 1993.

Entrega del Premio Sor Juana Inés de la Cruz / 1 de diciembre, 19:30 horas / Auditorio Juan Rulfo de la FIL Guadalajara


Otras ganadoras

2009
Cristina Rivera Garza (México, 1964)

2008
Gioconda Belli (Nicaragua, 1948)

2007
Tununa Mercado (Argentina, 1939)

2006
Claudia Amengual (Uruguay, 1969)

2005
Paloma Villegas (México, 1951)

2004
Cristina Sánchez-Andradeo (España, 1968)

2003
Margo Glantz (México, 1930)

2002
Ana Gloria Moya (Argentina, 1954)

2001
Cristina Rivera Garza (México, 1968)

2000
Declarado desierto

1999
Sylvia Iparraguirre (Argentina, 1947)

1998
Silvia Molina (México, 1946)

1997
Laura Restrepo (Colombia, 1950)

1996
Elena Garro (México, 1921-1998)

1995
Tatiana Lobo Wiehoff (Chile, 1939)

1994
Marcela Serrano (Chile, 1951)

1993
Angelina Muñiz-Huberman (Francia, 1936)