El Premio Nacional de Artes el mejor que le han dado en vida: Vilalta

CIUDAD DE MÉXICO (09/DIC/2010).- La escritora Maruxa Vilalta afirmó que el Premio Nacional de Ciencias y Artes 2010 'es el mejor que me han dado en la vida, por las ganas de reconocer mi trayectoria completa, los demás galardones han sido para la mejor obra del año, como autora o de carácter local, pero este reconocimiento es nacional', 
En entrevista divulgada por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), Vilalta agregó que 'siempre he sido nocturna, escribo de noche'.  

Añadió que quizá por ello en algunas de sus obras aparecen personajes sombríos, pero en otras busca la luz, con personajes de la religión católica, como San Ignacio de Loyola, San Francisco de Asís, San Jerónimo o el propio Jesucristo.  

'Hubo un tiempo en que me interesó hacer eso, pensaba que la religión era un poco rígida, un ritual sin mucho sentido humano, eso de ir a misa, confesarse, comulgar. Yo veía a los santos de otra manera, los veía como héroes, como gente valiente que defendía sus creencias', señaló.  

Recordó que por ejemplo, San Jerónimo, que escribió la Biblia como la conocemos ahora, fue un personaje que no quería ser cura sino escritor. 'Aun así logró traducir del griego y del hebreo, y nos dio la Biblia', recordó.  

'Jesucristo nunca fue aburrido, como lo son muchos curas en la actualidad; era igual que muchos hombres y trataba de ayudar al prójimo', expresó  

'Por eso la obra que escribí sobre él, Jesucristo entre nosotros, plantea cómo unos jóvenes relajientos y descreídos actúan como Jesús y María Magdalena. Al terminar la obra, la gente le besaba la mano al actor que hacía de Jesús. Con estas obras yo quería que la gente viera a la religión de otra manera', subrayó.  

Maruxa Vilalta (1932), dramaturga y directora de escena, inició su carrera en los escenarios en 1960 con la adaptación de su novela Los desorientados (1959) y, a partir del estreno, se dedicó por entero a la escritura dramática.  

'El acierto, o el pecado, de mi escritura es que siempre fue de vanguardia; fui y sigo siendo una escritora de vanguardia', comentó.  

Vilalta es autora de un gran número de piezas teatrales, la mayoría llevadas a escena por ella misma. Su teatro ha sido traducido, publicado y representado en diversos países.  

Ha ganado 10 veces el premio de los críticos a la Mejor Obra del Año. Sus temas preferidos son la incomunicación y el afán de evasión de los seres humanos, así como la crítica política, la protesta contra la injusticia social y la defensa del ser humano.  

Nació en Barcelona, España, el 23 de septiembre de 1932, hija del abogado Antonio Vilalta y Vidal, figura relevante en la Segunda República española de 1931, uno de los luchadores por el Estatut de la Generalitat, fundador del partido Esquerra Republicana, y de María Soteras Maurí, la primera mujer que se recibió de abogada en la Universidad de Barcelona.  

Maruxa recuerda: 'Yo no viví la guerra ni los combates, pero sí recuerdo a mi padre ayudando a los refugiados que llegaban a Bélgica, los apoyaba para conseguir pasaportes y salvoconductos para salir de Europa, hacía esto sin pedir nada a cambio'.  

Ya en México, 'yo viví una infancia muy feliz, mis padres estaban convencidos de que ser católicos era hacer el bien'. Mi papá abrió la Médico Farmacéutica, una sociedad que daba atención médica a quienes llegaban a solicitarla, de manera gratuita. Fueran refugiados u obreros mexicanos, sin distinción'.  

Maruxa obtiene la nacionalidad mexicana a los ocho años de edad. Estudia en Liceo Franco Mexicano y después ingresa a la Universidad Nacional Autónoma de México, donde estudia en la Facultad de Filosofía y Letras y luego cursa la maestría en Letras Españolas.