Cultura | Destacaron el Acueducto del Padre Tembleque, el 'Escudo Azul' en zonas arqueológicas El INAH tiene un sobresaliente 2015 con hallazgos y distinciones Destacaron el Acueducto del Padre Tembleque, el 'Escudo Azul' en zonas arqueológicas Por: NTX 23 de diciembre de 2015 - 16:45 hs La Unesco realizó de manera simultánea el reconocimiento a nueve zonas, una de ellas, la zona arqueológica de Monte Albán. EL INFORMADOR / ARCHIVO CIUDAD DE MÉXICO (23/DIC/2015).- El hallazgo del gran Tzompantli de México-Tenochtitlan, el arranque de la Cátedra Carlos Monsiváis, la inscripción del Acueducto del Padre Tembleque en la Lista del Patrimonio Mundial de la Unesco y la exhibición de la Máscara de Calakmul, son algunos de los acontecimientos que sobresalieron este 2015 en el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). Con más de siete décadas y media de ser un referente al preservar el patrimonio cultural e histórico de México, la institución que encabeza María Teresa Franco, una vez más sorprendió a México y el mundo, con diversas actividades, muchas de las cuales trascendieron en el año que concluye. El programa abarcó descubrimientos, investigación, conservación y difusión del patrimonio histórico, así como el rubro de la docencia con especialistas que imparten dichas disciplinas a través de actividades como coloquios, exposiciones, hallazgos, la publicación de textos, ferias de libro, impresiones en billetes de lotería, recorridos por zonas arqueológicas, por mencionar algunas. Entre las actividades que dejaron huella este año, destaca la decisión de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura ( Unesco), al otorgar el "Escudo Azul" a nueve zonas arqueológicas de México, misma que incluyó en el registro internacional de bienes culturales bajo protección especial. El evento simbólico por parte de la Unesco se realizó de manera simultánea en las nueve zonas que recibieron este distintivo internacional, teniendo como marco central la ciudad maya de Uxmal, al sur de Yucatán. Los nueve sitios son: la ciudad prehispánica de Palenque, Chiapas; la ciudad prehispánica de Teotihuacan, estado de México; la zona arqueológica de Monte Albán, Oaxaca; la ciudad prehispánica de Chichén Itzá, Yucatán; la ciudad prehispánica de El Tajín, Veracruz; la ciudad precolombina de Uxmal y sus tres pueblos: Kabah, Labná y Sayil, en Yucatán; la zona arqueológica de Paquimé, Chihuahua; la zona de monumentos arqueológicos de Xochicalco, Morelos; y la antigua ciudad Maya de Calakmul, Campeche. El "Escudo Azul" es el símbolo utilizado por dicha organización para identificar los sitios culturales con protección especial, la cual comprende situaciones en caso de conflicto armado y la planificación de medidas de emergencia ante desastres de origen natural o provocados por el hombre. Otra de las acciones relevantes de este 2015 recayó en el Acueducto del Padre Tembleque, una magna obra con 443 años de antigüedad y ejemplo sobresaliente del desarrollo de los sistemas hidráulicos en América, el cual fue inscrito en la Lista de Patrimonio Mundial de la Unesco. La decisión del Comité del Patrimonio Mundial, reunido en la ciudad alemana de Bonn, resultó favorable para la candidatura presentada por México. Con la decisión tomada en julio pasado por la totalidad de los Estados Parte del referido Comité, el bien denominado Complejo Hidráulico del Acueducto del Padre Tembleque ingresó en ese importante listado como Canal Patrimonial exento, es decir, que no forma parte de una zona de monumentos. El Acueducto fue erigido en 1554, durante 17 años, hasta 1571, por 40 comunidades indígenas, quienes aportaron 400 canteros, ayudantes, albañiles, peones, carpinteros y el financiamiento de las mujeres de esos pueblos quienes produjeron textiles para su venta en los "tianguis" y financiar las obras, sin la aportación de la Corona española. El acueducto posibilitó llevar agua a pequeñas poblaciones del yermo Altiplano mexicano, ubicadas entre los actuales estados de Hidalgo y de México. Por otra parte, en la calle de Guatemala en el Centro Histórico de esta ciudad, se localizó a dos metros de profundidad una plataforma rectangular con una longitud estimada en más de 34 metros, en la que había, en su núcleo, un elemento circular elaborado de cráneos humanos unidos con argamasa de cal, arena y gravilla de tezontle, que ha sido identificado como el gran Tzompantli de México-Tenochtitlan por los especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). De acuerdo con el arqueólogo Raúl Barrera, en el predio de Guatemala número 24, se encontró una sección de una plataforma con una altura aproximada de 45 centímetros y por lo menos de 13 metros de largo y seis metros de ancho. Por sus características y los materiales asociados, el Tzompantli corresponde a la sexta etapa constructiva del Templo Mayor (1486-1502). Otra parte de esta estructura arquitectónica fue destruida en la época colonial por la construcción de un edificio histórico, pero se aprecia en el piso las huellas de los orificios de los postes o vigas de madera donde se insertaban los 35 cráneos encontrados. El especialista del INAH señaló que muchos de estos cráneos fueron removidos y alterados durante la Conquista, cuando se produjo la destrucción de la ciudad de Tenochtitlan y del Recinto Sagrado. Hablando del Templo Mayor, este 2015 se conmemoraron 100 años del descubrimiento de los vestigios arqueológicos de dicho lugar prehispánico con la emisión de un billete de lotería a cargo de la Lotería Nacional. El sorteo realizado el pasado 3 de febrero con un premio mayor de 18 millones de pesos, coincidió con el aniversario 76 del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), que fue creado por ley promulgada el 3 de febrero de 1939, a iniciativa del presidente Lázaro Cárdenas. Asimismo, febrero también es significativo porque el día 21 de 1978, trabajadores de la Compañía de Luz y Fuerza encontraron de manera fortuita el monolito de la diosa Coyolxauhqui, lo cual dio pie al Proyecto Templo Mayor. La leyenda "100 años del Templo Mayor. Historia de un descubrimiento" apareció en el billete de lotería, donde se apreció la imagen en color sepia de este espacio ceremonial, que fue centro de la vida religiosa, política y social de la cultura mexica. Si de descubrimientos se trata, el 2015 fue relevante pues el pasado 19 de noviembre se hizo el hallazgo de los restos óseos de un personaje de alta jerarquía de la época prehispánica, con el nombre calendárico de Ometochtli, deidad del pulque, dentro de un aljibe en la Zona Arqueológica de Zultépec-Tecoaque, en Tlaxcala. De acuerdo con el INAH, resulto inusual, por ser el primero donde se encuentra una osamenta humana con una ofrenda compuesta por piezas de cerámica, fragmentos de huesos de niños y figurillas. El depósito mortuorio destacó por una piedra de color verdusco con tonos azules en forma de cilindro en cuya superficie está grabado el numeral o glifo -dos conejo- de Ometochtli, el cual también aparece en un trono hecho en tezontle, tallado en una sola pieza y con restos de pintura azul, hallado en el mismo contexto. La osamenta podría corresponder a un posible sacerdote o gobernante acolhua del periodo Posclásico (1520 d.C.), ubicada a una profundidad de seis metros y 20 centímetros. Por lo que hace al ámbito académico, este año se puso en marcha la Cátedra Carlos Monsiváis en la Dirección de Estudios Históricos, al cumplirse cinco años del fallecimiento del cronista e historiador de lo inmediato. En una larga velada de música y letras, Teresa Franco destacó que la Cátedra ha sido diseñada con el propósito de generar y promover un espacio permanente de estudio, reflexión y debate público inspirado y nutrido en Carlos Monsiváis y su vasto legado intelectual. En primer término, la Cátedra se propone promover el estudio de la obra del destacado periodista mexicano y la influencia que ha ejercido entre autores nacionales y extranjeros, dijo la titular del INAH, y enfatizó que el espacio académico también busca seguir las pautas trazadas por Monsiváis hacia aspectos como la lectura incansable, el cuestionamiento y la curiosidad hiperdocumentada por lo social, el ejercicio de la crónica, el ensayo y la historia. En cuanto a las exposiciones, el INAH sorprendió a los capitalinos con espectaculares muestras, una de ellas, llegó al final de este año bajo el título "Río Congo, artes de África Central", la cual presenta un total de 346 piezas que dan cuenta de las diversas identidades alrededor de la cuenca del río Congo, así como los rasgos afines que las impregnaron en la relación con sus aguas. Organizada por el INAH) y el Museo de Quai Branly de París, Francia, la muestra que se exhibe en el Museo Nacional de Antropología es una de las más importantes que se presenta en México, y llega en reciprocidad con "Mayas. Revelación de un tiempo sin fin". La exposición brinda un asomo a las artes gestadas más allá de las tradiciones occidentales conocidas, revelando un horizonte hacia culturas llenas de vigor y esplendor en las que se pueden encontrar, también, visiones comunes. Máscaras en forma de corazón, esculturas y textiles hablan de la fuerza de rituales y costumbres marcadas, a su vez, por la fuerza de sus poderosos caudales; asimismo, la valiosa colección incluye más de 100 piezas que nunca antes habían salido ni exhibido en Francia, entre las que figuran una extraordinaria colección de armas y tapices. Otra de las muestras fue "José María Morelos y Pavón. Generalísimo de los ejércitos de la América Mexicana", presentada en el Museo Nacional de Historia Castillo de Chapultepec, y que fue parte de las actividades que el gobierno federal realizó para conmemorar el nacimiento y deceso del también llamado "Siervo de la Nación". A través de 250 piezas, se ofrecen respuestas alejadas de convencionalismos para dar una imagen más humana de un personaje que, además de tener grandes cualidades políticas y militares, fue el primero en imaginar un proyecto de nación, un estadista de la independencia y la libertad de México. "La Máscara de Calakmul. Universo de jade", fue otra de las exposiciones que engalanaron este 2015 en el Museo Nacional de Antropología y en la que a través de una sola pieza altamente significativa, se explicaron múltiples elementos del pensamiento y la cosmovisión de una de las grandes culturas: la maya. La muestra invitó al espectador a introducirse en una experiencia de conocimiento que apela a los sentidos y, a través de las nuevas tecnologías, se busca acercar las obras maestras de las culturas de México a nuevos públicos, especialmente a los jóvenes. Dicha exhibición presentó animación, cédulas digitales, escaneo y la impresión en 3D como herramientas, las cuales representan una forma novedosa de transmitir la información académica, producto de la investigación y la conservación de la más alta calidad. El pasado 4 diciembre, el Museo Nacional de las Culturas celebró 50 años con la exposición "Iguales y diversos. Mitos de tres continentes", que reunió 88 obras que dieron cuenta de los ritos en la costa noroeste de Norteamérica, Irán y Australia. En cada sección ofreció al visitante una serie de conocimientos y saberes tradicionales que ha acumulado por generaciones y ha transmitido por tradición oral. Éstos son plasmados en narraciones míticas así como en esculturas de madera, libros y pinturas. Estas actividades se distinguieron como lo más sobresaliente en el programa de trabajo de este año del INAH, que también desarrollo un amplio e intenso ejercicio en los rubros de investigación, difusión y preservación del patrimonio cultural. Temas INAH Patrimonio UNESCO Lee También Día Mundial de la Música: ¿Por qué se conmemora cada 22 de noviembre? ¿Se puede desheredar a un hijo? El señor Cabañas México recupera 220 piezas prehispánicas que estaban en el extranjero Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones